Se hizo famoso por una frase que pronunció en el marco del debate de la reducción de la jornada laboral en el Congreso. "Yo limito la jornada, entonces ustedes tienen que trabajar menos. ¿Para qué? O sea, está mal trabajar? ¿Estamos en contra del trabajo? ¿Para qué? ¿Para ir afuera a hacer qué?", soltó el dirigente industrial Julio Cordero, ante el plenario de comisiones que trata una norma para modificar la carga horaria, que podría pasar de 48 a 40 semanales. 

Cordero, que es titular del Departamento de Política Social de la Unión Industrial Argentina (UIA), atiende además en otros dos mostradores: por un lado, es abogado laboralista en esa agenda por parte de Techint, la empresa de Paolo Rocca; por otro, es también integrante de los equipos de Patricia Bullrich que elaboran nuevas leyes para el trabajo, con centro en el interés de la mejora de condiciones de las empresas. 

Cordero es uno de los encargados de los temas laborales de Techint y es, también, parte de los representantes de la UIA en la mesa del Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil. Coinciden en esa instancia con Daniel Funes de Rioja, presidente de la central fabril y titular de uno de los estudios de letrados laborales más importantes del país. En esta dualidad de personajes entra la mano del holding de Rocca, detalles que se verán más adelante en este artículo. 

El acercamiento de Cordero a los equipos de Bullrich data de principios de año. Contaron a PáginaI12 que lo llevó el exministro de Industria de Mauricio Macri, Dante Sica, hoy al frente de ese equipo y con quienes se conocen de aquellos años de disputa entre las fábricas y el Ejecutivo, que tenía una concepción particular de qué hacer con las chimeneas. Pero Cordero quedó en buenas migas porque, como dicen los pícaros de la UIA, "una cosa son los fierreros y otra los bogas del trabajo". 

En la factoría Bullrich de la reforma laboral, de la que es parte Cordero, hay dos objetivos centrales: uno, el cese de la ultra-actividad, que hoy sostiene de manera automática los convenios colectivos que llegan a su fin. Quieren que ese régimen se termine. El otro punto álgido es el fin de las indemnizaciones tal y como se las conoce hoy. Buscan hacer una especie de fondo o fideicomiso de despidos, que no especifican cómo se lograría. 

Son, basicamente, proyectos de reforma laboral realizados en el seno de las empresas nacionales. Techint allá es actor central, tanto que Cordero no es el único representante de la "T" en los equipos de Bullrich. También lo integra el ex Gerente de Recursos Humanos de la firma de Rocca, Ernesto Rona

Los muchachos de Paolo

El caso de Cordero, un insider de Paolo Rocca en la UIA y en los equipos de Bullrich, es sólo un síntoma ahora visible de una metodología de trabajo de Techint: en pocas palabras, infiltrar cuadros propios en las filas de las gremiales empresarias, para penetrar con sus ideas; y en la política, para "guiar" a los gobiernos de turno hacia políticas de interés del holding del acero. 

Rona, otro de los Techint boys que junto a Cordero trabajan con Bullrich, también tiene un pasado vinculado a tareas dentro del Estado. En 2016, apenas desembarcada en el gobierno de la provincia de Buenos Aires, fue contratado por la gestión de María Eugenia Vidal. En Techint desde 1978, Rona cursó estudios junto a Roberto Gigante, ex ministro de Coordinación de Vidal. Fue él quien lo llevó a uno de los cargos mejores pagos de la plantilla. Rona se encargó de la evaluación de los trabajadores docentes, sobre todo en los vinculado al presentismo, algo que en su momento generó un choque muy fuerte con los gremios. 

La empresa de Rocca lotea la política y, sobre todo, las gremiales empresarias. La UIA, por caso, es casi un coto de caza del empresario ítalo argentino. Juan Iocco, gerente de Cadena de Provisión de Ternium supo estar al frente del Departamento de Transporte de la entidad. Marcelo Martínez Mosquera, jefe del Departamento de Energía de la UIA es la vez el responsable de Energía de Techint y uno de los hombres fuertes del Club del Petróleo. 

Por su parte, Carlos Abeledo, director impositivo de Techint, se encarga de los temas de política tributaria de la UIA. Por último, Flora Otero, de la Organización Techint, fue jefa del Departamento Pyme de la UIA, mujer fuerte en la Cámara del Acero, otro polo de lobby de Paolo Rocca.