La detención de un joven argentino de 17 años en la provincia de Entre Ríos el pasado 11 de agosto permitió frustrar un suicidio colectivo pactado por un grupo de personas residentes en varios países de Europa y Sudamérica en el marco de un caso similar al reto de la “Ballena Azul”, informó ayer la policía del País Vasco, que dirige la investigación internacional. 

El joven era el inductor del suicidio colectivo y fue arrestado por la Policía Federal Argentina en su domicilio de San José, Entre Ríos, seis días antes de la fecha pactada para consumar la acción, explicó la Ertzaintza (policía vasca) en un comunicado. En la habitación del muchacho, además de materiales informáticos que están siendo investigados, fueron localizados varios cuchillos y trinchetas así como gasas impregnadas de sangre. El joven fue puesto bajo la tutela de especialistas psiquiátricos, precisaron las autoridades españolas. 

Uno de los responsables de la policía regional vasca, Hugo Prieto, dijo que el grupo estaba integrado por seis jóvenes: una joven vasca, un mexicano y cuatro argentinos. Todos ellos eran jóvenes con problemas de adaptación y que se refugiaban en este chat para sentirse comprendidos.

La operación movilizó tanto a organismos internacionales, como Interpol, como órganos judiciales y unidades especializadas de investigación de ambos lados del Atlántico. 

La investigación continúa abierta con el objetivo de identificar a la totalidad de las personas implicadas, esclarecer completamente las circunstancias que envuelven el caso y, sobre todo, descartar la existencia de otros grupos que pudieran haber sido creados por el menor con las mismas intenciones.