La mayor parte de las más de 2.000 personas --entre personal médico, pacientes y refugiados-- que se encontraban en el mayor hospital de la Franja de Gaza abandonaron este sábado las instalaciones, en cumplimiento de un ultimátum militar de Israel, cuyo Ejército negó haber dado.

El director general del Ministerio de Salud gazatí, Munir al Bursh, afirmó en declaraciones a la cadena televisiva Al Jazeera que Israel llamó a evacuar el hospital Al Shifa, donde cinco médicos se quedaron para supervisar el proceso de desalojo de los heridos. Las fuerzas israelíes, que realizaron por cuarto día consecutivo una operación militar en el hospital, exigieron temprano por altavoz abandonar el lugar en una hora, de acuerdo a lo consignado por un periodista de la agencia de noticias AFP en el lugar.

Sin embargo, el Ejército emitió poco después un comunicado en el que niega haber ordenado la evacuación forzosa del centro, sino que trabaja en colaboración con las autoridades de Al Shifa para facilitar el desalojo de aquellos pacientes que así lo requieran. El hospital lleva varios días sin electricidad y los jefes de departamento aseguraron que decenas de pacientes murieron porque el equipamiento médico dejó de funcionar.

Según el último balance del Ministerio de Sanidad gazatí, la cifra de muertos subió a más de 16.000 --de los que el 70% son niños, mujeres y ancianos--, en el marco de la campaña de bombardeos de Israel contra la Franja de Gaza, en represalia por el ataque terrorista de Hamas que mató a 1.200 personas y tomó 240 rehenes, que incluye una veintena de argentinos.

Disparos a los centros de refugiados

Mientras tanto, un bombardeo israelí contra una escuela Al Fajura de Gaza, administrada por la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA), causó decenas de muertos, informó la agencia oficial de noticias palestina WAFA"Estamos recibiendo imágenes y vídeos horribles de decenas de personas muertas y heridas en otra escuela de UNRWA que alberga a miles de desplazados en el norte de la Franja de Gaza", señaló en redes sociales el comisionado general de UNRWA, Philippe Lazzarini. "Estos ataques no pueden convertirse en algo común; deben cesar. Un alto el fuego humanitario no puede esperar más", agregó.

También murieron al menos cinco palestinos en un ataque israelí con un dron en el campo de refugiados de Balata, uno de los focos de violencia en Nablus, en el norte de Cisjordania, donde ya suman 212 los palestinos muertos en incidentes violentos con Israel desde que comenzó la guerra el 7 de octubre, informó Wafa. "Un avión de las Fuerzas de Defensa de Israel atacó un escondite utilizado por terroristas involucrados en la planificación de ataques terroristas inminentes contra civiles y objetivos militares israelíes", señaló el Ejército israelí en un comunicado, confirmando la realización de la ofensiva.