Jake LaMotta, uno de los boxeadores de la era dorada de ese deporte, murió ayer a los 95 años por una neumonía. Así lo confirmó su esposa Dense. El “Toro Salvaje del Bronx” estaba internado en un hogar de ancianos. Con su muerte, el boxeo se despidió, en forma definitiva, del siglo XX.

Nacido el 10 de julio de 1922 en Nueva York como Giacobbe LaMotta, el hijo de un inmigrante italiano se abrió camino a los golpes para escribir su historia entre 1941 y 1954. Su trayectoria fue de 106 pelas, con 83 victorias, 19 derrotas y 4 anuladas. En junio de 1949 consiguió el título mundial de los medianos al vencer en Detroit al francés Marcel Cerdan. Fue la última pelea del  galo, pareja de Edith Piaf: un accidente de aviación le costó la vida pocas semanas más tarde y truncó la posibilidad de una revancha.

El gran rival de LaMotta fue Sugar Ray Robinson. Se enfrentaron seis veces, y la que pasó a la historia fue la última pelea, el 14 de febrero de 1951. Esa noche, Robinson despojó de su título a LaMotta con una golpiza fenomenal que, por analogía con la fecha, quedó en los anales del boxeo como “Masacre de San Valentín”.

Cuenta de Facebook de Daniel Piazzolla.
LaMotta, de saco gris, entre medio de Astor Piazzolla y su hijo Daniel, en Nueva York, en mayo de 1976.

Se retiró sin pena ni gloria en 1954. Su hermano Joey había sido su entrenador y representante. Su relación se fue deteriorando en los años finales de la carrera de LaMotta, quien además tuvo una tormentosa vida amorosa, con siete matrimonios.

Junto a Nino Benvenuti y la edición italiana de sus memorias, en 1980, año de la película.

En 1970 publicó sus memorias y ese fue el material del que se nutrió Martin Scorsese para realizar Toro Salvaje, de 1980. La actuación de Robert De Niro fue antológica en la piel de LaMotta. El rodaje se demoró para que el actor engordara, y su actuación le valió el Oscar. Esa noche, al recibir la estatuilla, LaMotta estaba en la platea.

Sufrió la pérdida de dos hijos el mismo año, 1998. Jake Jr. sucumbió a un cáncer, y Joseph murió en un accidente de aviación. “Solo quiero que la gente sepa, él era un hombre grande, dulce, sensible, fuerte, irresistible, con un gran sentido del humor”, lo despidió su esposa al difundir la noticia de su muerte, confirmada por una de sus hijas en las redes sociales.