Desde Corrientes

El oficialismo correntino paralizó la noche del domingo y hasta ayer a la madrugada el escrutinio provisorio para, con solo el 30 por ciento de las mesa escrutas y una diferencia de 6 puntos a favor, desatar el festejo que la alianza Eco+Cambiemos compartió con los ministros del gobierno macrista que llegaron desde Buenos Aires para nacionalizar el triunfo del radical Gustavo Valdés como nuevo gobernador de Corrientes. Ayer por la mañana, ya con el total de las mesas escrutadas, la diferencia se ensanchó al nueve por ciento y Valdés –que hoy se reunirá con Mauricio Macri en Casa Rosada– ofreció una rueda de prensa para ratificar “el alineamiento de la provincia con la nación” y asumir el nuevo desafió que le encomendó el gobierno nacional: ganar las tres bancas de diputados que dirime la provincia el 22 de octubre. El peronista Carlos “Camau” Espínola, en tanto, reconoció ayer su derrota pero sostuvo que “el 45 por ciento de los correntinos quieren vivir otra cosa, no están contentos y hay que trabajar por ellos”, al tiempo que propuso buscar “un equilibrio” parlamentario en la elección nacional, donde el frente que lo respaldó irá dividido. 

Los correntinos se fueron a dormir avanzada la madrugada del lunes con la autoproclamación del oficialismo como ganador de la elección a gobernador, pero con apenas el 30 por ciento escrutado y sin certezas. El recuento se reanudó a las 3 de la madrugada y a las 9 de la mañana ya estaba el 100 por ciento del escrutinio provisorio. Aunque adujeron “problemas técnicos”, los tiempos en los que estuvo paralizado el conteo coincidieron con la duración de los festejos del oficialismo y el retorno de los ministros nacionales, Marcos Peña y Rogelio Frigerio, con el objetivo de no aguar la fiesta y nacionalizar el resultado de la elección provincial.

Sin explicaciones por el parate y el retraso, el oficialismo exhibió ayer los números finales: Encuentro por Corrientes (ECO) + Cambiemos, que postulaba a Valdés junto al actual vicegobernador Gustavo Canteros con 332.629 votos (54,06 por ciento del electorado), mientras el Frente Corrientes Podemos, con el binomio del peronista Carlos “Camau” Espínola y el radical massista Eugenio “Nito” Artaza alcanzaban 278.026 votos (el  45,19 por ciento). Lejísimo quedó la tercera fórmula en disputa, la del macrista díscolo Sebastián Ríos Brisco y Lorena Macri, con apenas el 0,75 por ciento y tan solo 4622 votos. 

Valdés llegará hoy al encuentro con Macri en Buenos Aires en compañía del actual mandatario provincial, el también radical Ricardo Colombi, quien lo ungió como su delfín y continuador pero que no está dispuesto a soltar las riendas de la concentración de poder que alcanzó en los ocho años al frente de Corrientes. Este será el mayor desafío que enfrentará Valdés durante su mandato, aun con alineamiento con el gobierno nacional.

Antes de sumir como gobernador, Valdés ya contrajo el compromiso al que lo ataron desde Casa Rosada y ayer blanqueó públicamente. Convocó a una rueda de prensa, junto a su compañero de fórmula y actual vicegobernador, el peronista Gustavo Cantero, y los tres candidatos a diputados nacionales que compiten en la elección dentro de 13 días. “Falta muy poco para el 22 y pondremos toda la fuerza de ECO+Cambiemos para lograr el mejor de los resultados posibles, que es nada más ni nada menos que meter los tres diputados nacionales por la provincia”, soltó Valdés ante los periodistas. 

Una propuesta que el ministro de Interior, Rogelio Frigerio, adelantó en la medianoche del domingo desde escenario en los festejos en la costanera correntina: “Les pido que esta energía la sostengan dos semanas más porque el necesita los diputados de Corrientes para el Congreso nacional”, dijo el ministro ante la militancia radical.  “A no aflojar vamos por mas”, agregó.

En conferencia de prensa, y luego que Espínola reconociera la derrota e hiciera un llamado al “diálogo” provincial, Valdés invitó a “Camau” y Artaza a “sumarse” a ECO, la fuerza provincial que diseñó Colombi.   

–A pesar del alineamiento con el gobierno nacional el triunfo es fundamentalmente del radicalismo ¿cómo miembro de la UCR considera que debe tener una representación mayor en el gobierno nacional como se discute en su partido? –preguntó PáginaI12. 

–Además de la representación parlamentaria tenemos varios ministros en el gobierno nacional. Somos parte integrante como UCR de Cambiemos. Nosotros necesitamos que los gobernadores, intendente de la UCR, el PRO o cada uno de los partidos políticos que lo integren tengan el apoyo del gobierno nacional, no de más como se planteaba antes, sino para trabajar en un pie de igualdad. Por ser de un color político distinto, como nos pasó a los correntinos, éramos discriminados absolutamente y con el poder discrecional de los recursos que tiene el Estado, iba a todo a Formosa, Chaco y Misiones y a los correntinos no nos daban absolutamente nada. Tenemos que tener un federalismo importante sino es imposible que el interior y las economías regionales se desarrollen. Te doy un ejemplo: la posibilidad que dio el Presidente de que el 10 por ciento de las viviendas puedan ser de madera, porque nosotros somos la primera potencia forestal de la Argentina y podemos generar miles de puestos de trabajo para los correntinos.

–También se habló desde el Gobierno de importar casas de madera desde China –le recordó este diario

–Bueno, está bien, pero a nosotros nos favorece enormemente más allá de la importación. Lo peor es que no haya políticas y nosotros, con 570 hectáreas, no sabemos qué hacer. Después de una política de incentivo de 40 años, llegó el conflicto con las pasteras y acá el sector quedó sin hacer nada.   

Más temprano Espínola y Artaza habían convocado a su propia rueda de prensa para expresar su repudió al parate del recuento, aunque admitieron la derrota. “No lo hicimos antes por prudencia porque no se cargó lo suficiente, eso genera inquietudes que no favorecen a la democracia y a la transparencia”, señaló Camau y agregó: “el gobierno nacional festejo sin la carga de datos”. 

“Luchamos contra grandes estructuras donde el 45 por ciento de los correntinos quieren vivir otra cosa, no están contentos y hay que trabajar por ellos”, dijo Espínola para remarcar su postura opositora y reclamó “equilibrio nacional en el Congreso”, con vistas a la elección del 22. Aunque en esa contienda la coalición que lo respaldó irá divida y donde Artaza encabeza la lista del Frente Renovador.

Este es uno de los motivos con que el Gobierno nacional y el oficialismo correntino se esperanzan en alzarse con las tres bancas de diputados que reparte la provincia. En ECO+Cambiemos creen que con “el peronismo dividido, sin financiamiento y dos derrotas consecutivas (en las PASO y la provincial) les será difícil hacer campaña y perderán votos”. Aunque para alcanzar el objetivo, Cambiemos debería trepar a casi el 70 por ciento de los electores de Corrientes.