Romero (6): No tuvo responsabilidad en el gol que abrió la cuenta en el Atahualpa. Después se mostró seguro, incluso cuando debió resolver algunos errores defensivos de sus compañeros.

Mercado (5): Arrancó mal, no pudo frenar a Ibarra en la jugada del gol ecuatoriano. Mejoró cuando se afirmó en la cancha. En la segunda parte perdió una pelota otra vez frente a Ibarra, que generó un contraataque peligroso.

Mascherano (5): A los 50 segundos perdió en un salto frente a Ordóñez, cuyo cabezazo habilitó a Romario Ibarra para que éste definiera solo ante Romero y pusiera el 1-0. Esa falla lo marcó para el resto del partido. Se mostró inseguro en la marca y, por momentos, tomó malas decisiones. 

Otamendi (6): También tuvo problemas cuando los delanteros ecuatorianos apuraban por su sector. Sólido en la segunda parte, anticipó en la jugada que terminó en el tercero de Messi.

Salvio (6): Contenido en el ataque, cuidadoso en la marca. Se asoció bien con Enzo Pérez y Biglia. Fue reemplazado por Fazio a los 89.

E. Pérez (6): Al igual que Salvio, buscó más cuidar su posición que sumarse en las jugadas ofensivas.

Biglia (6): No se complicó con la pelota y fue clave para la salida del equipo. 

Acuña (5): Jugó unos metros más adelantado que frente a Perú y se esperaba más de su capacidad de desborde, pero pasó poco al ataque. En la segunda parte bajó para integrar la línea de cuatro que dispuso Sampaoli.

Messi (10): La pidió siempre, la jugó redonda y definió todavía mejor. Anotó el 1-1, tras un pase de Di María, y fue la llave que cambió la noche, cuando otra vez habilitado por Di María, definió de zurda para el 2-1. Se le escapó a tres ecuatorianos para anotar por arriba del arquero el 3-1. 

Di María (7): Recostado sobre la izquierda, le dio profundidad al equipo, se asoció perfectamente con Messi, al que habilitó en el primer gol y después le dio el pase defectuoso que el capitán capitalizó igual en la jugada que terminó en el segundo gol. Tuvo otra chance propia de gol, tras otra pared con Messi.

Benedetto (5): Lejos del gol, hizo el trabajo sucio, arrastrando marcas y peleando arriba. Fue reemplazado, a los 75, por Icardi, que falló un mano a mano en el minuto 90.