En una sesión que selló el pacto entre el PRO y La Libertad Avanza, Bartolomé Abdala es el elegido para ocupar la presidencia provisional del Senado. La elección de Abdala marca dos claves: una es la estrategia de acuerdos por parte del bloque ultraderechista para conseguir pasar alguna de las reformas que Javier Milei aún no envió al Congreso. Y lo segundo es la una muestra de pragmatismo y alianzas políticas alejada de la promesa de combatir a "la casta" política, ya que el puntano fue presidente del PRO en su provincia y antes ministro de Turismo del gobierno de Alberto Rodríguez Saá.
Abdala es contador público de oficio, pero es parte del sistema político desde hace años. Entre 2008 y 2009, encabezó la cartera de Turismo de Rodriguez Saá, pero debió presentar su renuncia cuando el gobernador puntano decidió reformar el gabinete y correrlo tras varias críticas por su mala gestión al frente del ministerio en la organización de la temporada de verano, festivales y eventos deportivos, que son centrales para la economía puntana.
Tras esa mala experiencia en la gestión, Abdala -un cruzado en contra del aborto legal- saltó a las filas del PRO puntano, del que fue presidente y diputado provincial. Su salida del espacio ocurrió en 2021, cuando la presidenta del PRO Patricia Bullrich decidió intervenir el partido provincial. Bullrich designó al legislador porteño Esteban Garrido para reordenar el partido a nivel provincial, en la previa de las elecciones legislateivas de aquel año.
"La página de un partido franquiciado por una sola persona persiguiendo intereses particulares quedó atrás", sostuvo en aquel año el dirigente del PRO puntano Carlos Pereira, al validar la decisión de Bullrich de correr a Abdala de la conducción. La mirada del ahora presidente internino del Senado para justificar su paso al costado fueron los "desmanejos y maltratos" de la conducción porteña del partido.
Alejado de las dos fuerzas mayoritarias a nivel provincial y nacional, Abdala inició conversaciones con Carlos Kikuchi --quien asesoró de cerca a Milei en el armado electoral hasta las PASO-- y cerraron un acuerdo para sumarse a la fuerza de ultraderecha en diciembre pasado.
"Creo que Javier es el que mejor representa las ideas de la libertad que tenía el propio Mauricio Macri al inicio de su carrera política y que después, cuando fue gobierno, no supo o pudo aplicar. Por eso me convencí a acompañarlo a él", dijo como un augurio Abdala al momento de enrolarse en el partido de Milei. Con Macri, Abdala no solo comparte una simpatía política sino también sus vínculos con el fútbol, ya que el senador electo --que asumirá el próximo 5 de diciembre-- fue presidente de la Liga provincial.
Ahora, en una alianza política con el partido del que se fue hace solo dos años, Abdala será el encargado de diseñar la estrategia legislativa en la Cámara Alta. En el Senado, la ultraderecha deberá llevar las iniciativas presidenciales en clara desventaja: Unión por la Patria contará con la primera minoría con un total de 35 senadores --uno de ellos ganado a la ultraderecha en el escrutinio definitivo en San Juan--, mientras que Juntos por el Cambio --con la incógnita del rol que cumplirán los senadores de la UCR y del PRO-- tendrá 24 senadores.
Entre las nuevas caras de la ultraderecha que conducirá Abdala estará la del riojano Juan Carlos Pagotto, quien ha oficiado como abogado defensor de personas acusadas por delitos de lesa humanidad.