A fines del año pasado, el Pantone Color Institute -referente global en sistemas de color- decretó que un carmesí matizado llamado Viva Magenta reinaría el 2023, vaticinando que el mundo se teñiría de este rojo arraigado en la naturaleza “que vibra con energía y vigor, que expresa una nueva señal de fuerza”. Para el flamante 2024, empero, la entidad ha bajado unas cuantas revoluciones, prefiriendo decantarse “por una tonalidad cálida y acogedora, que transmite un mensaje de compasión y empatía”, en palabras de Laurie Pressman, vicepresidenta del Instituto. Ergo, el nuevo color del año escogido por Pantone, como ya es tradición, que seguramente inunde pasarelas, fotografías de Instagram, tableros de Pinterest, casas de decoración, en los siguientes meses: el Peach Fuzz 13-1023.

“Sutilmente sensual, el Peach Fuzz 13-1023 es un tono melocotón que evoca sinceridad y ternura, comunidad y colaboración. Es cálido y reconfortante; estimula nuestro deseo de unión con los demás, o de tener momentos de quietud; también despierta cierta sensación de protección”, señaló la mentada Pressman al dar el gran anuncio en un año especial para la entidad. Y es que el Pantone Color Institute cumple el cuarto de siglo eligiendo el color del año de estreno, habiendo empezado por el ya icónico azul cerúleo que, en 1999, dejó huella en moda, diseño, belleza, etcétera, de nombre bastante poco poético: Pantone 15-4020.

Al respecto, vale recordar que la selección nunca ha sido ciento por ciento caprichosa sino el concienzudo resultado de una investigación muy seria, conforme detalla el diario El País: “Para llegar a la elección de cada año, el equipo recorre el mundo en busca de nuevas influencias cromáticas. Pueden encontrarse en la industria del entretenimiento (cine, series de televisión e incluso música), obras de arte y nuevos artistas; por supuesto, en la moda y el diseño, pero también en lugares o conceptos más aspiracionales, como pueden ser destinos de viaje que empiezan a ser tendencia, estilos de vida, nuevas tecnologías y materiales, texturas o efectos -sí, como los filtros de redes- que generan interés o acaparan la atención de alguna forma”.

En lo que respecta al Peach Fuzz, que al parecer veremos hasta en la sopa en el 2024, explican voces en tema que, asociado a la moda, ofrecerá una sensación “reconfortante que invita a tocar, transmite tactilidad”; también -en lo que refiere a la industria beauty- “es un tono sorprendentemente versátil que aviva la piel y añade una calidez sutil a los ojos, los labios y las mejillas, dando una apariencia saludable”. Y en diseño, en general, “transmite una sensación vintage: refleja el pasado pero reimaginado para ambientes modernos”.