Apenas pasado el mediodía, a lo largo de avenida Rivadavia en inmediaciones de Plaza Miserere, se veía una postal repetida: negocios con las persianas bajas, sin luz y empleados pasando secadores sobre los pisos inundados mientras apilaban mercadería donde podían para salvarla del agua. Sucede que los 60 milímetros de lluvia caídos en apenas una hora inundaron la avenida. Así, entre el caudal del agua y el movimiento de los vehículos, el agua se desbordó, avanzó por las veredas y se transformó en una visita inesperada que inundó edificios y locales. "Hasta el Buda se puso a flotar", aseguró una de las empleadas de La Botica Milagrosa mientras seguía sacando agua a baldazos. Ubicada en Rivadavia al 2600, se trata de un negocio especializado en sahumerios, velas y talismanes. En la entrada suele haber una estatua de Buda sentado en estado de meditación de tamaño natural. Pero quienes atienden el lugar debieron sacarlo rápidamente y correrlo hacia el fondo cuando la tormenta estalló. Y ahí siguió él, meditando con las rodillas húmedas.

Esta es apenas una de las múltiples postales, un poco tremendas, un poco hilarantes, que se vieron por instantes en numerosas calles y avenidas de diferentes barrios porteños mientras un diluvio caía sobre la ciudad de Buenos Aires. Además de los cortes de luz, varias líneas del subterráneo debieron interrumpir sus servicios. También se produjo la demora de decenas de vuelos y la cancelación de otro en el Aeroparque Jorge Newbery, según información oficial.

Pescando autos en Caballito

De acuerdo al último parte del Gobierno porteño, Palermo, Belgrano, el Aeroparque, Retiro y Constitución “fueron las zonas más afectadas con anegamientos temporarios que en la mayoría de los casos empezaron a drenar en cuanto la tormenta empezó a pasar”.

Los pasos bajo nivel de Yatay y de Salguero quedaron intransitables e inundados ante la copiosa cantidad de agua caída, indicaron.  “En la zona de Constitución cayeron más de 60 milímetros en una hora, una cantidad que no es usual”, señalaron.

Esto también se vio en la red social X, donde la gente subió videos mostrando el desastre pero, en algunos casos, sin perder la ironía. "Viva la libertad, carajo" iba gritando un hombre en un utilitario por Parque Chacabuco, abriéndose paso por la calle anegada. "Viva Perón", le respondían los vecinos que se guarecían bajo los aleros y debían sufrir los embates de verdaderas olas dejadas por el utilitario. Los contenedores de basura parecían tener vida propia arrastrados por la corriente. En Yatay y Lezica, cinco hombres debieron "pescar" un auto en la zona del viaducto, completamente anegada. Y cataratas de agua bajando por las escaleras del Parque Rivadavia fueron registrados con la leyenda "Caballito Falls". También hubo varios videos de las zonas inundadas cerca de la Biblioteca Nacional o por Avenida de Mayo.

Mientras tanto, con una sensación térmica de 33,5 grados, había poco más de 90.000 usuarios sin luz en la ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense, de acuerdo al reporte de las empresas Edesur y Edenor en la página del Entre Nacional de Regulación de la Electricidad (ENRE) emitido por la tarde. 

Subtes y vuelos afectados

Todo esto también impactó en todas las líneas de subte. En tanto, la Línea A que cubre el recorrido Plaza de Mayo-San Pedrito, en el barrio porteño de Flores, quedó interrumpida, la Línea B (Alem-Juan M. de Rosas) operaba entre cabeceras y la Línea C (Constitución - Retiro) operaba con servicio limitado entre Constitución y Diagonal Norte aunque cerca de las seis de la tarde pudo normalizar el servicio. La Línea E (Retiro-Plaza Virreyes) registró doble servicio limitado entre Retiro-Entre Ríos y Boedo Virreyes mientras que en la Línea H (Hospitales-Facultad de Derecho) el servicio limitado es entre Parque Patricios y Facultad de Derecho y las formaciones no se detienen en la estación Santa Fe, informó la empresa Emova. La línea D se encuentra cerrada hasta marzo para llevar adelante tareas de modernización del sistema de señales.

La lluvia también afectó la actividad del Aeroparque Jorge Newbery. Un vuelo de Aerolíneas Argentinas debió ser desviado a Ezeiza porque no pudo aterrizar en el momento en que más arreciaba la tormenta, mientras que el arribo de un vuelo de Flybondi que procedía de Neuquén fue cancelado. El aeropuerto internacional de Ezeiza operó con total normalidad.

Calentamiento global

Para paliar la situación, el Gobierno porteño desplegó en toda la ciudad un operativo que incluyó mantenimiento de la Red Pluvial con 12 camiones y 9 camionetas, y con un personal afectado de 49 personas. Además, en pasos bajo a nivel, trabajaron 7 camionetas con 14 personas; en estaciones de bombeo, una camioneta y 12 personas; y de la Dirección General Sistema Pluvial, 9 camionetas y 27 personas.

El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) informó en su cuenta de X que "las tormentas que afectaron recién al Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) están desplazándose muy lentamente hacia el Río de la Plata y Uruguay". Además, indicó que las condiciones permanecerían inestables.

Todo esto ocurrió mientras que Copernicus, el Programa de Observación de la Tierra de la Unión Europea, informó que el mundo enfrentó por primera vez temperaturas 1,5 grados más cálidas que en la era preindustrial durante 12 meses seguidos. Es decir, desde febrero de 2023 a enero de 2024. Los científicos aseguraron que este dato representa una "alerta para la humanidad". El Buda de Once lo dijo primero.