Hay ocasiones en que la fugacidad de una alegría se convierte en noticia o al menos en dato original de alguna historia. Tres casos políticos pueden hablar de esto, diferentes entre sí, los une el encogimiento de su tiempo con cierta gloria.

El diputado Bromosódico: Enrique Badessich

La Argentina de sus primeros momentos de extensión democrática, como fue con la sanción de la ley 8871 del voto secreto y obligatorio (pero no votaban las mujeres) en marzo de 1912, tuvo una de sus primeras muestras de originalismo y humor político en las elecciones cordobesas de abril de 1922 donde Enrique Badessich, un tucumano de 26 años, se presentó como candidato a legislador provincial en la Docta. Y lo hizo por un partido armado en broma y para la ocasión por estudiantes de medicina que tuvo por nombre Partido Bromo Sódico Independiente.

Conocido en el ambiente bohemio y estudiantil por su estilo extravagante, hizo esa campaña con una enorme proliferación de discursos en donde proponía economizar tela en los hábitos sacerdotales, o sea acotarlos, para con el sobrante fabricar ropa para niños pobres, hablaba del amor libre, planteaba la separación de Iglesia y Estado, quitar de todas las calles, las esquinas, para evitar choques entre automóviles y proclamar a Córdoba como República independiente.

Para sus presentaciones en la campaña, vestía un traje de papel y se ataviaba con ridículos y enormes sombreros. Como la UCR había asumida la abstención electoral, se descontaba que ganarían los conservadores, pero quedaba la posibilidad de un lugar por la minoría. ¡Y ese espacio, lo ganó Badessich! Apoyado por muchos estudiantes de la Universidad local que impulsaron como un chiste su candidatura, y con cierto aire de “antipolítica” (pocas cosas nuevas bajo el sol), se obtuvo la banca (solo votó un 18% del padrón y los conservadores obtuvieron el 90%, entrando por cociente restante Badessich).

Cuando Badessich se presentó a asumir la banca obtenida, la Legislatura lo rechazó por “incapacidad y falta de decoro” aclarando que era una persona “notoriamente incapacitada para ejercer el cargo”.

Abdalá Bucaram: El “Loco” de Ecuador.

Abdalá Jaime Bucaram Ortiz fundador del Partido Roldosista Ecuatoriano había asumido en agosto de 1996 y el 7 de febrero de 1997 ya era un expresidente.

Apenas habían pasado menos de seis meses desde su celebrada asunción en agosto de 1996, luego de una campaña en donde acompañado por una banda de rock, cantaba con ellos y se autopreciaba de ser el Mick Jagger de la política. Decía cosas como que a él al igual que a Cristo y a Gandhi lo llamaban loco.

Su gobierno recibió fuertes críticas al plan económico y a una forma errática de presentarse en público y cierta ostentación que calificaban de impúdica. Carente de límites hizo gala de una enorme incontinencia verbal donde insultaba a sus oponentes. A su contrincante Javier Nebot, lo llamó el anticristo y a otro, en un debate lo acusó, de “tener el esperma aguado”. Llegó a calificar a detractores de "maricas, pendejos y aniñados”.

Violencia e insultos se repetían en su cotidianeidad, como estilo y como creencia de ganar popularidad con eso.

Miles en las calles, acompañaban el pedido de destitución parlamentaria, insultos y calificativos caían sobre la figura del hasta entonces carismática, divertido y original mandatario. “Basta ya payaso” era lo más suave que le decían. "La mezcla de paranoia y grandilocuencia es su estilo” agregaban otros.

Y le endilgaban cierta enajenación mental como motivo para no poder ejercer su presidencia.

De todas formas y a pesar de su estilo agresivo y ciertamente original para un presidente, la causa de su derrocamiento lo origina la puesta en marcha de un plan económico pretendido como de austeridad con fuerte impacto empobrecedor.

Opositores políticos y gremiales decían que “la permanencia de Bucaram era un problema económico, social y político ya que las medidas impulsadas estaban impuestas desde afuera por el FMI y el Banco Mundial y era un modelo neoliberal intolerable”

Haciendo uso de un artículo de la Constitución y bajo el cargo de incapacidad mental fue destituido por el Parlamento. Su fin comienza con una paradoja, ya que la moción para destituirlo en el Parlamento ecuatoriano en febrero de 1997, la hace un diputado Social Cristiano de apellido “Verduga” y se convirtió en el “verdugo” del entonces presidente.

Liz Truss: Una segunda dama de hierro británica que se oxidó muy rápido

Mary Elizabeth Truss fue primera ministra del Reino Unido entre septiembre y octubre de 2022. Truss es conocida por sus puntos de vista económicos libertarios y su apoyo al libre comercio.

Se opuso a cualquier ayuda en el campo social. Fue hostil a los trabajadores, propuso limitar el derecho de huelgo. Intentó reducir salarios del empleo público y descreía de políticas que requieran inversión para cuidar el ambiente.

Presentó un presupuesto con muchos recortes fiscales sin sustento financiero y esto provocó gran desorganización de la economía inglesa.

Su muy breve período de gobierno estuvo signado por el caos político y económico mientras ella insistía en objetivos de “libertad” que se alcanzarían con sus medidas ya que confiaba en que “Así es como convertiremos el círculo vicioso del estancamiento en un círculo virtuoso de crecimiento” y estaba "absolutamente determinada" a llevar adelante el resto de su plan para "conseguir un crecimiento más fuerte, un Reino Unido más próspero y salir de la tormenta”.

Pero bueno, duró solo 44 días.