A la desfinanciación total impuesta desde enero pasado y la baja del programa de fin de semana que corría por la TV Pública, se conoció esta semana que el Gobierno nacional planea intervenir la Universidad Nacional de las Madres de Plaza de Mayo (UNMA). Si bien no hay aún comunicación oficial, se conoció una resolución en la que la ministra de Capital humano, Sandra Pettovello, reemplaza sin fundamentos concretos a Cristina Caamaño, rectora electa de la casa de altos estudios del organismo de derechos humanos, que señaló la decisión como “fraudulenta e ilegal”. Los repudios se acumularon en los últimos días. Desde el gremio docente de la universidad denunciaron que “todo es parte del encono y la persecución política de este Gobierno con las Madres de Plaza de Mayo”.
A través de un comunicado que difundieron el jueves pasado, la Asociación Madres de Plaza de Mayo denunció que el gobierno "dispuso la ilegal intervención” de la UNMA. La noticia se supo por la circulación de una resolución del Ministerio de Capital Humano –EX-2024-74633284– que, con la firma de Pettovello, ordenó la designación de Eduardo Luis Maurizzio como rector organizador de la institución que permanece desfinanciada desde enero por decisión de la gestión de Pettovello y el gobierno de Javier Milei. Hasta diciembre de 2023 y durante dos años, Maurizzio fue secretario administrativo de la institución educativa. En 2022 fue denunciado por violencia laboral por una empleada de la casa.
Aunque aún no fue publicada en el Boletín Oficial ni comunicada de ninguna manera oficial al personal docente y no docente de la universidad, la decisión implicaría el desplazamiento de Cristina Caamaño. Caamaño fue designada en ese cargo en diciembre de 2023, cuando el espacio de formación superior, que lleva más de 20 años de funcionamiento, dejó de ser instituto universitario de Derechos Humanos para pasar a ser, por ley, una universidad nacional. A principios de marzo, la exinterventora de la ahora exAgencia Federal de Inteligencia fue elegida por la asamblea universitaria.
Los repudios al avance gubernamental sobre la casa de altos estudios de las Madres de Plaza de Mayo no tardaron en llegar. Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, la red nacional de H.I.J.O.S., Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas y el resto de los organismos repudiaron la intervención y lo consideraron un “nuevo ataque contra el movimiento de derechos humanos por parte de este gobierno negacionista y apologista de la última dictadura”. Hubo rechazos a la resolución y expresiones de solidaridad con las Madres desde sectores políticos y gremiales, de organizaciones sociales y culturales.
“Estamos hablando de una intervención ilegal, ilegítima”, definió por su parte Caamaño en declaraciones con Radio AM750. La aún rectora advirtió que el gobierno nacional “quiere que la Universidad desaparezca porque es la única universidad de Latinoamérica con orientación en Derechos Humanos y a este gobierno negacionista loque más le preocupa es sacar todo lo que esté vinculado con los derechos humanos”.
La intervención se suma al rechazo que recibió la UNMA en el fuero contencioso administrativo la semana pasada. Allí, el juez Pablo Cayssals rechazó la medida cautelar autosatisfactiva que había interpuesto la institución para que Capital Humano destrabara los fondos para la universidad, que durante todo el primer cuatrimestre funcionó de manera virtual “porque no hay plata ni para una resma de papel”, sostuvieron trabajadores. Ninguno de los 220 docentes ni los 40 trabajadores no docentes cobran salario desde diciembre pasado. Son más de 2200 alumnos los que cursan carreras en la UNMA. “Por un lado nos niegan un financiamiento estipulado en el presupuesto nacional y por otro lado, después de casi 8 meses, deciden nombrar un interventor que tampoco cumple con requisitos legales de la Ley de Educación Superior para poder ser rector”, consideró Caamaño.