El Tribunal Oral en lo Criminal N° 2 de San Isidro condenó a los DJ Lucio De Crocci, Lucio Rossi y Rodrigo Puente a tres, dos y un año y ocho meses de prisión, respectivamente, por el delito de “homicidio culposo” cometido contra la diseñadora Aldana Salama. En 2009, la joven de 24 años fue invitada por su novio, De Crocci, a la casa de Rossi, en Vicente López. Allí, Salama se desvaneció por una sobredosis de cocaína. Los tres condenados cargaron a la víctima en un auto y condujeron sin destino. Cuando ingresó al Hospital Privado Modelo, a seis cuadras de la casa de Rossi, la diseñadora llevaba más de una hora muerta.

“Fue una pequeña gran victoria porque representa una batalla que llevamos desde hace ocho años. También fue meritorio el trabajo de la Fiscalía, con todas las pruebas que recolectaron. Al fin, la Justicia entendió que los tres imputados fueron responsables de la muerte de Aldana”, dijo a PáginaI12, Eduardo Turale, abogado de la familia. Pero, para el letrado, el sabor del fallo sigue siendo agridulce: al igual que el fiscal general adjunto John Broyad, Turale había solicitado en su alegato la pena de diez años de prisión por la figura de abandono de persona seguida de muerte. “Es sencillo de comprender: Aldana se descompuso a una hora determinada. Recién a la hora y media llegó al Hospital. ¿Qué pasó en el medio? Ese lapso lo dice todo”, agregó el abogado. Tanto él como Broyad apelarán el fallo en Casación.

Ayer, luego de más de dos meses de audiencia, los jueces Julieta Makintach, Lino Mirabelli y Esteban Andrejin leyeron la sentencia que condena al novio de Salama, De Crocci, por una pena de tres años de prisión, mientras que Rossi y Puente, amigos del novio, fueron sentenciados a dos años y uno y ocho meses, respectivamente. Todas las condenas son de ejecución condicional y seguirán en libertad, tal como habían llegado a juicio. 

Para conseguir la condena de los tres disc jockeys, el camino no fue sencillo. Luego de la muerte de Salama, quien falleció por sobredosis de cocaína, el fiscal Broyad se hizo cargo de la investigación, acusó a los tres DJ por abandono de persona y su pedido de juicio fue avalado por el juez de Garantías 3 de San Isidro, Rafael Sal Lari. Pero las defensas de los tres imputados apelaron y la Cámara de Apelaciones de esa localidad, sobreseyó a los tres acusados. Un nuevo fallo, esta vez, de la Sala III de Casación, revocó la decisión anterior y los tres DJ fueron enviados al banquillo de los acusados. 

La noche del 18 de diciembre de 2009, Aldana Salama festejaba con sus amigas el fin de año de las clases que daba en un templo judío. Cerca de la medianoche, la joven atendió un llamado de De Crocci, quien la invitaba a la casa de Rossi, en el barrio bonaerense de Florida. Según relata el fiscal Broyad, su novio y los dos amigos “colocaron en situación de desamparo a la víctima, quien se encontraba incapaz de valerse por sí misma” por el cuadro de intoxicación que padecía la joven. Los tres metieron a Salama en un Honda Fit “sin dirigirse a ningún centro asistencial, sino, por el contrario, circularon con destino incierto”.

En su periplo, los tres condenados bajaron a la víctima del auto en el cruce San Martín y avenida del Libertador, la acostaron en la calle y llamaron al 911. Luego, volvieron sobre sus pasos y condujeron hasta la clínica Privado Modelo. La diseñadora ingresó en la guardia a las 2.10 de la madrugada. Una médica que la intentó resucitar declaró que la diseñadora estaba muerta hacía más de 40 minutos. Héctor Moreira, médico forense, precisó que Salama había fallecido entre la 0 y 1.30 de esa madrugada.

Informe: Jeremías Batagelj.