Las imágenes se hicieron rápidamente virales. Empezaron a circular en los medios y las redes casi como una cadena nacional. A finales del 2020 se la veía a Dolores Etchevehere junto a un grupo de militantes, entre los que se encontraba Juan Grabois,  en el interior de un estancia familiar en Entre Ríos donde pretendía desarrollar un proyecto de alimentos agroecológicos, y su familia denunciando una usurpación y la toma de terrenos. 

Si bien la poderosa familia de los hermanos Etchevehere denunció a una de sus hermanas de intentar robarles una estancia, tras cinco años de tire y afloje, la justicia determinó la absolución Dolores, en el marco de la causa que investigaba la supuesta usurpación de Casa Nueva.

La decisión fue adoptada por el Tribunal de Juicios y Apelaciones N° 5 de Entre Ríos. El juez Gervasio Pablo Labriola dictó un adelanto de su veredicto, aunque se espera que la semana que viene se conozcan los fundamentos del fallo.

Pero hay más, porque en paralelo a esta decisión, sus hermanos Luis Miguel - el exministro de Macri -, Juan Diego y Sebastián Etchevehere, así como su madre, Leonor Barbero Marcial, enfrentan múltiples procesos judiciales por estafa, fraude bancario y extorsión.

Entrevistada por la 750, la propia Dolores explicó cómo se llegó a esta instancia de enfrentamiento con la parte de la familia que llamó los “Etchevehere corruptos”, y precisó con claridad a quiénes incluye en esta categorización.

Luis Miguel, dos veces presidente de la Sociedad Rural Argentina y ministro de Agroindustria de Macri; Sebastián, actual director de la Anses por Entre Ríos; y Juan Diego, director de la Sociedad Rural Argentina por Entre Ríos”, explicó.

Dijo que ellos, junto a su propia madre, fueron quienes la llevaron a juicio “por usurpar una de las estancias del acervo hereditario de una sucesión que hoy continúa indivisa luego de 16 años administrados por ellos”.

“¿Cuál es el objetivo de ellos de hacer esto? Primero, robarme las tierras. Lo intentan, lo intentan y lo intentan. Incluso me meten este juicio absurdo teniendo la sucesión indivisa. Entonces por eso fue mi reclamo en 2020. Con el objetivo de que visualice esta maquinaria de corrupción”, señaló. Y para mostar el “modus operandi en el que usan la justicia para enriquecerse estafando a los que menos se pueden defender”.

Además, dijo que la movida fue para llevar adelante un proyecto sin agrotóxicos, t"ratando a la tierra de otra manera, generando alimentos santos”. Es decir, el famoso Proyecto Artigas del que Grabois formó parte.

“Por eso fui a pedirle ayuda a Juan, le expliqué la situación. Juan no es ningún improvisado. Él estudió toda la documentación y a partir de ahí dijo que era una injusticia”, sostuvo.

Y afirmó: “Los Etchevehere corruptos llegaron al juicio con denuncias falsas. Luis Miguel, dos veces presidente de la Sociedad Rural y ministro de Agroindustria, se sentó y declaró con mentiras y sin pruebas. Esto se tiene que saber. Es gravísimo. Y lo hizo denunciando a su hermana de cosas falsas. Y el juez le pidió las pruebas y no las tuvo”.