Si no hay sorpresas de último momento, el directorio del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) aprobará la fusión de Telecom y Cablevisión el próximo jueves 21 de diciembre. Los rivales ya lo dan como un hecho y la discusión ahora está centrada en las medidas que se tomarán para que a partir de enero, cuando las telefónicas queden habilitas para brindar televisión, haya una competencia efectiva en el mercado de las comunicaciones. Una de las novedades que acompañará la fusión será la autorización por decreto para que las telcos puedan brindar televisión satelital y así competir con mayor facilidad contra el Grupo Clarín, que en la actualidad tiene una mejor red de fibra óptica. También se está trabajando para que las telefónicas no sólo compitan en el Área Metropolitana de Buenos Aires, Rosario, Córdoba y Santa Fe sino en todo el país, salvo en las localidades de menos de 80 mil habitantes donde el servicio sea prestado únicamente por cooperativas o pequeñas y medianas empresas.  

Las telefónicas sostienen que una vez autorizada la fusión la única empresa que estará en condiciones de brindar cuádruple play (telefonía fija, móvil, televisión paga y banda ancha) en el corto plazo es Telecom-Cablevisión porque la red de las telefónicas es fundamentalmente de cobre y no resiste un paquete de señales audiovisuales. Por eso reclaman poder brindar televisión por satélite. Del lado de Cablevisión responden que ellos tienen una red mejor porque invirtieron en fibra óptica, mientras que las telefónicas no lo hicieron. A su vez, remarcan que si se habilita a las telefónicas a dar televisión satelital nunca invertirán en fibra óptica. Las telcos responden que no invirtieron en fibra porque tenían prohibido brindar televisión y que ahora lo están haciendo de manera acelerada, pero necesitan el satélite para competir de igual a igual mientras avanzan con el fibrado. La decisión del gobierno es concederles ese pedido a las telefónicas a través de un DNU firmado por el presidente Mauricio Macri.  

El otro punto clave es donde se competirá. El decreto 1340 de diciembre del año pasado estableció que desde el 1 de enero de 2018 las telefónicas podrán brindar televisión en el AMBA, Rosario, Santa Fe y Córdoba, mientras que la fecha de inicio para el resto del país deberá fijarla el Enacom. Las cableras, en cambio, están habilitadas para ofrecer televisión paga en cualquier lugar del país. Si se cumple esa norma, Telecom podría brindar televisión solo en cuatro grandes ciudades y eso también podría afectar a Cablevisión ya que, una vez aprobada la fusión, la controlante formal de la nueva sociedad es Telecom. Por eso lo más probable es que se flexibilice la norma para que compitan en todo el país, salvo en las pequeñas localidades.