La empresa Wenance de España, subsidiaria de Wenance de Argentina, ambas pertenecientes al financista Alejandro Muszak, oriundo de San Isidro y detenido en el penal de Ezeiza hace casi un año, ocultaba casi tres millones de euros en transferencias a empresas propias.

El dato, que surge de una pericia contable realizada por la administración concursal de la causa civil y comercial que tramita en los tribunales madrileños, se conoció  través de una comunicacion del estudio jurídico Ramón y Cajal a sus clientes, en el marco de la feria judicial de verano, que en ese país dura todo el mes de agosto.

Wenance es la fintech que prestaba dinero por internet a sectores no bancarizados de la población. Desde 2016 fue demandada sucesivas veces por usura y cobros abusivos a los tomadores de crédito. En julio de 2023 dejó de cumplir sus obligaciones con los inversores. 

La operación consistía en emitir títulos de deuda por esos préstamos y colocarlos, tercerizando así el riesgo. Llegó a vender hasta seis veces el mismo préstamo, lo que constituye una típica conducta de esquema Ponzi, donde los nuevos inversores pagan los beneficios de los anteriores.

En el mencionado documento, al que accedió Buenos Aires/12, se da cuenta de un crédito en favor de "México",  por E 2.843.728, que en realidad es un giro de capital a otra empresa asociada. 

Esta práctica era habitual en Muszak, que para disimular su actividad de intermediación financiera ilegal, creaba sociedades que captaban fondos de inversores, que luego fondeaban a las distintas empresas de lending, como se conoce a las que realizan préstamos personales por internet, como Wenance de Argentina o de España.  

El resultado de ese modus operandi, extendido a lo largo de varios años, es una maraña de sociedades de papel, en las que se repiten casi siempre los mismos nombres (Pedro Vigliano, Paola Vallone y Rodolfo Cleto García), que obliga a una minuciosa y prolongada tare de investigación.

En el mismo texto, los abogados recuerdan que la demora en obtener los resultados de las pericias se debe fundamentalmente a la falta de colaboración por parte de la empresa e invitan a sus clientes, ahora que está probada la condición fraudulenta de la quiebra, a sumarse como querellantes en la causa penal.

Los inversores defraudados creen que la causa penal en España es la que más preocupa a Muszak. Una condena en un país europeo iría acompañada de sanciones accesorias y el impedimento de realizar operaciones financieras de por vida.

En febrero pasado, ocurrió en Uruguay algo similar a lo que anuncian los abogados españoles. El síndico puesto en funciones por la justicia del vecino país determinó que Wenance de Uruguay tenía dos millones de dólares, y ordenó que se repartieran proporcionalmente entre los acreedores. El problema de fondo radica en que la deuda total concursada y acreditada, entre Argentina, Uruguay y España, supera largamente los 300 millones de dólares.

Los estafados reclaman al juzgado de Sandra Arroyo Salgado mayores recursos y compromiso con la recuperación del dinero, que habría sido pasado a criptomonedas cuando se anunció la supuesta quiebra y aún no se pudo restituir.

Nexos con $LIBRA

Varios querellantes reconocieron a Mauricio Novelli, el joven trader titular de una academia de educación financiera, cuyo principal promotor era el presidente Javier Milei, como ex empleado de Wenance e integrante del entorno de Muszak y suponen que el financista debe haber ejercido una suerte de mentoría sobre su joven émulo.

Novelli, que habría trabajado en Wenance aproximadamente entre 2018 y 2020, tuvo un alto nivel de exposición mediática estos días, por ser socio de Manuel Terrones Godoy en la organización del Tech Forum de octubre pasado, en el que disertó Milei y donde trabó relación con Mark Hayden Davis, para planificar la estafa de $LIBRA, que finalmente se consumó el 14 de febrero pasado, a pesar de las reiteradas advertencias de los conocedores del sector.

La situación de Novelli se fue complicando conforme se conocieron nuevos documentes fílmicos y fotográficos que dan cuenta de cómo abrió una caja de seguridad, la llenó con el contenido de unos bolsos poco después de que Hayden Davis realizara una transferencia cuyo destinatario la justicia espera conocer pronto, y la vació, acompañado de su madre y su hermana, el lunes 17 de febrero, primer día hábil posterior a la estafa.