La condición humana, en las antípodas de la “naturaleza” humana, se está redefiniendo en estos umbrales de un nuevo milenio.
Los días y las noches no dan tregua. Mientras se insiste con reinstalar una nueva versión de la teoría de los dos demonios, un genocidio sin antecedentes se lleva a cabo y se transmite, en tiempo real. La condición humana es un campo de batalla que escribió su último capítulo