Los hijos del fascismo no son locos ni odiadores. Los hijos del fascismo tienen un plan.
Así como durante los tiempos de militancia por el aborto legal, seguro y gratuito nos disputamos la palabra vida, el sentido y alcance de esa palabra, estos son tiempos en los que nos estamos dispu
La autora aborda el feminismo como un viaje colectivo fenomenal, corpóreo y carnal. Un viaje de iniciación motorizado por una huida o una búsqueda emancipatoria.
La autora reflexiona en torno a las certezas que ya no son tales y sobre cómo vivir sin la confianza en que algo de sentido dotará de saber y de vida al presente y al futuro.
Niñas, adolescentes y adultas abortan.A veces mueren. Otras no mueren, pero cargan en sus vidas las marcas estragantes de la clandestinidad, la crueldad, las violencias padecidas.