El arquero Franco Armani firmó finalmente ayer a la tarde el contrato que lo ligará con River, tras destrabarse el conflicto con Atlético Nacional de Medellín, y se convirtió en el segundo refuerzo de la entidad de Núñez, junto con Lucas Pratto. Tras varios días en los que los colombianos no aceptaban las condiciones de pago ofrecidas desde la entidad de Núñez, ayer hubo acuerdo en el tema de los avales y Armani estampó la rubrica y en las próximas horas viajará a  Miami para sumarse a la pretemporada, junto al resto del plantel que conduce Marcelo Gallardo. 

Ayer a la mañana, Atlético Nacional había advertido que el pase del arquero  no se iba a destrabar hasta que el club argentino presentara avales “satisfactorios” para respaldar el pago de las últimas dos cuotas de la cláusulas de rescisión. La institución colombiana había aclarado en un comunicado oficial que ha puesto “toda su voluntad” para que el futbolista “cumpla el sueño de jugar en un grande de su país”, pero insistió en la presentación de las garantías “en defensa del patrimonio”. Por la tarde, se destrabó la situación, River cumplió con los requisitos y se terminó la espera para el ex arquero de Ferro y Deportivo Merlo.

Por otra parte, quedaron casi descartadas las llegadas de Lucas Zelarayán y de Silvio Romero, de Tigres y América, ambos de México, por sus elevadas cotizaciones.