El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu (foto), rechazó ayer las acusaciones de corrupción de la policía en su contra y aseguró que no se sostienen. Netanyahu aseguró que las denuncias de que aceptó sobornos de multimillonarios y de que se confabuló con el dueño de un periódico son tendenciosas y extremas. “Como ya les dije ayer (el martes) estoy seguro de que la verdad saldrá a la luz. No saldrá nada de esto”, aseguró en una conferencia con líderes municipales en Tel Aviv. El anuncio de la policía, que recomendó presentar una acusación formal contra el primer ministro por corrupción, hizo aumentar los reclamos de la oposición para que Netanyahu renuncie. “Netanyahu no es respetable y debe renunciar a su cargo”, exigió Avi Gabbay, líder del Partido Laborista, de centro izquierda. Pero Netanyahu, que es primer ministro desde hace nueve años y lo fue también entre 1996 y 1999, sigue mantiendo firmes apoyos en el sector consevador. La coalición de gobierno de Netanyahu se mantiene estable por el momento, después de que el ministro de Finanzas, Moshe Kahlon, un miembro clave, anunciara que no renunciará a menos de que el fiscal general de Israel acuse formalmente al primer ministro. Se estima que el ministro de Educación, Naftali Bennett, líder del partido La Casa Judía, hará una declaración similar. Las acusaciones, que se presentan después de un año de investigaciones, se refieren a dos casos: en uno, la policía lo acusa, junto con su mujer Sara y su hijo Yair, de aceptar regalos de dos empresarios entre 2007 y 2016 por valor de un millón de shekels (unos 282.700 dólares). Se trataría de puros, champagne y joyas. El otro caso investigado se refiere a las supuestas maniobras de Netanyahu con el editor de un diario para perjudicar a un adversario que era crítico con el gobierno. Según medios israelíes, la policía recomendó también la imputación de ese editor y de uno de los empresarios. El fiscal general, Avichai Mandelblit, podría tardar meses en tomar una decisión respecto de si sigue la recomendación de la policía o no.