• River entró a por todo y rápidamente se encontró sin nada debido a las aceitadas combinaciones entre el Morro García y Garro, que marcaron un gol y una asistencia cada uno.
  • Los fallos arbitrales jugaron en contra del Millonario. No sólo en lo material sino que, además, descolocaron a los jugadores de River, que gastaron demasiadas energías en la protesta contra Baliño.
  • De la mano de un incansable Mora y de un acertado Pratto, el equipo de Gallardo llegó a la igualdad. Pero nunca pudo aspirar a más de eso. River, con nombres nuevos, sigue jugando como antes: mal.