Acabo de leer en la tapa de Página/12 sobre una empresa que va a fabricar muñequitos de Saddam ahorcado. Hoy, el noticiero de Univisión aquí en Estados Unidos dio una triste noticia, un niño de 10 años vio por TV las imágenes de cuando le pusieron la soga al cuello a Saddam, se fue a su cuarto y se ahorcó. Ojalá alguien tome conciencia y le prohíba a la empresa la fabricación de los muñequitos. Ya bastante sufrimiento hay en el mundo con las guerras y el terrorismo para que más inocentes sigan muriendo inútilmente en una demostración cruel del desprecio por la vida.

Marta Quarleri

Newport, RI, EE.UU.