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San Lorenzo, que desde 1960 sueña con levantar la Copa Libertadores, tuvo un buen comienzo ante el último campeón del certamen, Once Caldas, en el estadio Palo Grande, de la ciudad de Manizales. Era un partido difícil, ante un rival que venía agrandado, pero el conjunto de Héctor Veira no se complicó nunca y, si bien cedió bastante el control de la pelota, parado de contraataque, se mostró mejor que los locales en cuanto a situaciones de gol. En varios pasajes del partido estuvo cerca de ganarlo, pero no se le dio porque falló en la puntería.
En el arranque, San Lorenzo, que venía confiado por su contundente victoria sobre Boca el último domingo, se vio un poco sorprendido frente al planteo de Once Caldas, bien parado en la cancha, como haciendo gala del título de campeón que ayer comenzó a defender, y con una evidente presión en todos los sectores de la cancha, que le permitió inquietar al arquero José Ramírez, como cuando Jefrey Díaz, entrando por la derecha, tras ganarle la posición a Walter García, sacó un lindo remate cruzado que pasó muy cerca del palo derecho.
Pero el equipo de Boedo, sobre todo cuando Pablo Barrientos se soltaba, también generaba situaciones peligrosas. Pudo abrir la cuenta Hernán Peirone, con un potente zurdazo que se le fue apenas desviado; luego lo tuvo Leonardo Fabio Moreno, tras una excelente habilitación de Barrientos, pero el arquero José Cevallos, reemplazante de Henao, reaccionó a tiempo y terminó anticipándose al remate del delantero visitante. Luego, tras un centro de Eduardo Coudet, Moreno iba a tener otra chance, de cabeza, pero la pelota se le levantó muy por arriba del travesaño.
De ida y vuelta, los últimos minutos de la primera etapa tuvieron mucho vértigo, pero poca precisión. Los colombianos se repitieron en pelotazos frontales para sus delanteros, lo que no les daba resultados. San Lorenzo, por su parte, sumó otra chance cuando Pablo Zabaleta, habilitado de taco por Peirone, remató sobre el cuerpo de Cevallos.
Tras el descanso, fueron los de Veira los que tomaron la iniciativa. Peirone, habilitado por Barrientos, sacó un buen centro que Moreno no llegó a conectar bien y la pelota terminó pasando muy cerca del palo izquierdo del arquero. Después iba a llegar un remate cruzado de Aldo Paredes, que terminó sobre el cuerpo de Cevallos. El problema de San Lorenzo parecía estar más que nada en la definición, ya que Peirone no pareció estar afilado como lo había estado el último domingo ante Boca.
Once Caldas, en cambio, continuaba manejando la pelota, pero no conseguía llegar con claridad porque no encontraba profundidad como para llegar con la pelota dominada ante el arco de Ramírez. Bueno fue el desempeño de la última línea sanlorencista, donde trabajaban bien Jonathan Botinelli y Walter García, sobre todo en el final del encuentro, cuando los locales, en un último esfuerzo, consiguieron arrinconarlos a fuerza de centros.