DEPORTES › LA CONSIGNA DE LOS DIRIGENTES DE PRIMERA

Empezar el fútbol como sea

Quieren alejar el fantasma del lock out y jugar para empezar a recaudar cuanto antes. Pero siguen tirando dardos contra la aplicación del IVA y los enormes costos de la seguridad policial.

Si la idea del fútbol era no empezar los campeonatos, como una manera de llamar la atención del Estado sobre sus problemas casi terminales, murió antes de nacer porque los clubes necesitan recaudar fondos. Según un sondeo de la agencia Télam, la mayoría de los presidentes de los clubes de Primera pretenden que el Clausura 2002 empiece cuando está previsto, a mediados de febrero, para no terminar de arruinar sus economías.
Sólo unos pocos, como el titular de Newell’s, Eduardo López, se muestran partidarios de no iniciar el fútbol. Curiosamente, un dirigente arguyó razones políticas para empezar el torneo, “para no agravar la situación del país si la gente se queda sin su principal distracción”; ese dirigente es el presidente de Banfield, el cuadro del que es hincha el presidente Eduardo Duhalde (ver recuadro).
Julio Humberto Grondona le había apuntado a Página/12, a fines del 2001, que “tal como está la situación económica de los clubes, será muy difícil empezar la temporada oficial en 2002”, posición que suscribió Agremiados. Pero en los clubes, los puntos de vista coinciden en líneas generales por comenzar a jugar, y a recaudar.
Los dirigentes siguen tratando de focalizar la atención del Estado en dos temas espinosos: la aplicación del IVA a las entradas del fútbol, y el elevado costo de los operativos de seguridad que les impone la Policía Federal. “Ya no podemos pagar operativos cuyos policías se destinan a diez cuadras de la cancha, en los que no se pueden controlar la cantidad de efectivos que trabajan”, argumentan.
Pero la urgencia que imprimen los enormes déficit de los clubes ha hecho prevalecer la idea de comenzar a jugar como sea, para sumar ingresos, aunque aprovechando el momento para renegociar el delicado tema de las deudas con los futbolistas, que superan los 34 millones de pesos. La mayoría de los dirigentes cree que el acuerdo que se firmó en mayo pasado con Agremiados está perimido.
“No se pueden pagar más primas extraordinarias y se deben adecuar los sueldos y los premios a la situación que vive el país. Está bien que los jugadores pretendan ganar dinero, pero hay que adecuar los contratos en función de la devaluación” es la idea que se está generalizando entre los dirigentes de Primera.
Para ellos “no iniciar el torneo no aporta nada”, como dijo el presidente de River, José María Aguilar. Pero el rosarino López puso una voz discordante ante las urgencias. “¿Qué institución se maneja solamente con lo que recauda? -se preguntó- No hay ninguna, si siempre se pierde plata cuando se juega”.
La situación parece tan desesperada que hasta algunos reclamos están desfasados de la realidad. “Nuestro Estado nunca aportó absolutamente nada y debería hacerlo. Esto no pasa en ninguna parte del mundo”, enfatizó el presidente de Gimnasia, Héctor Domínguez, como si las cuentas nacionales fueran tan florecientes como para proporcionarle un excedente a los mismos clubes que ya le deben 100 millones de pesos a la AFA.

Compartir: 

Twitter

Las canchas vacías, como la de Independiente, intranquilizan a los dirigentes, que no recaudan.
Quieren que el Clausura empiece en la fecha prevista, pero renegociando las deudas con los futbolistas.
 
DEPORTES
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.