La recaudación acusó el impacto de la crisis internacional. Los ingresos tributarios de noviembre alcanzaron los 21.649 millones de pesos, sólo un 17,6 por ciento más que el mismo mes del año pasado. Estos datos reflejan una fuerte desaceleración en los ingresos del Estado, que durante los primeros diez meses del año habían aumentado 38,6 por ciento. El golpe más fuerte llegó desde el sector externo. Los derechos de exportación venían creciendo por encima del ciento por ciento, pero en noviembre reflejaron una variación interanual nula. Desde el Gobierno explicaron que se debió a una fuerte caída en las cantidades exportadas, principalmente de granos y petróleo. Esta merma estuvo compensada, en parte, por subas interanuales en los precios. El titular de la AFIP, Claudio Moroni, describió la situación como un efecto “transitorio” y “generado por el lado de la oferta”. Los rubros que reflejan el nivel de actividad interna tuvieron un comportamiento aceptable en sintonía con los primeros diez meses del año.

Los derechos de exportación alcanzaron los 2201,2 millones de pesos, registrando una variación interanual negativa del 0,1 por ciento. En tanto, lo recaudado por la Aduana en concepto de importaciones cedió 2,1 por ciento. El titular de la AFIP, Claudio Moroni, explicó que durante noviembre se registró una “fuerte baja en los volúmenes exportados”. Según el ente recaudador, las exportaciones de soja cayeron 70 por ciento, mientras que las de maíz y trigo lo hicieron un 10,7. Además, las ventas de aceite producido con la oleaginosa retrocedieron 60 por ciento. Pero, para Moroni, no hay que preocuparse demasiado, ya que “el grano existe, fue cosechado y en algún momento se va a exportar”.

Otro sector que se resintió fue el petrolero. Las exportaciones de crudo cayeron 56,6 por ciento, al mismo tiempo que se registró un retroceso en el precio. La recaudación se vio afectada, ya que a los combustibles se les aplica alícuotas móviles.

De todas formas, para el Gobierno el nivel de recaudación alcanzado en noviembre está dentro de lo esperado. “A pesar de la menor cantidad de días hábiles del mes y pese a la crisis que afecta a los mercados internacionales, el sistema tributario continúa reflejando un resultado razonable”, apuntaron desde el Ministerio de Economía. Los que sí se mostraron sorprendidos fueron los analistas privados. Las consultoras esperaban una recaudación floja, alrededor de los 23 mil millones, pero se encontraron con un resultado peor. Para el economista de la Cepal, Adrián Ramos, “éste es el primer mes donde se empiezan a ver más claros los efectos de la crisis internacional sobre la economía argentina, el impacto sobre los derechos de exportación y aranceles marca un quiebre de la tendencia”.

En los impuestos relacionados con el nivel de actividad, la desa-celeración fue menor. El desempeño del IVA y las Contribuciones patronales explican más de la mitad del aumento registrado el mes pasado. El IVA reflejó un aumento interanual del 15,7 por ciento, contra el 32 por ciento acumulado para los primeros diez meses de 2008. Sin embargo, los recursos de ese impuesto provenientes de las ventas internas se mantuvieron en línea con lo registrado en el año. Los datos del IVA de noviembre registran las operaciones de octubre, según Marina Dal Poggeto, economista de la consultora Econviews. “El frenazo en la recaudación fue menor en los niveles de actividad. Octubre había sido un mal mes en ese sentido, pero no tanto para el consumo ya que el IVA se mantuvo”, indicó. Por su parte, los impuestos al cheque y a las Ganancias subieron apenas 13,4 y 12,7 por ciento, respectivamente. Mucho más crecieron las contribuciones patronales: 55,3 por ciento.