La actividad industrial registró en julio una caída desestacionalizada de 2,9 por ciento respecto de igual mes del año pasado, según el informe del Centro de Estudios Económicos de la Unión Industrial. Contra junio previo, la actividad fabril creció un 1,8 por ciento, mientras que el acumulado de los siete meses del año exhibió un retroceso de 1,4 por ciento. Según el informe de la UIA, la evolución de la actividad industrial continúa exhibiendo una gran heterogeneidad, con una caída pronunciada en la producción de acero crudo y del sector automotor, “aunque menor a la experimentada en el trimestre anterior”. “A estos sectores se sumó una desaceleración en la producción del sector químico y petroquímico”, explicó. Por el contrario, los sectores textil y de edición e impresión continuaron contribuyendo a revertir el rojo del primer semestre del año.