ECONOMíA › KIRCHNER DIJO QUE ESPERA ANUNCIAR UNA SUBA GLOBAL DE HABERES PREVISIONALES

Fuego lento para el aumento a jubilados

“En algunos meses” podría haber una recomposición universal, indicó el Presidente. Reflotó así una propuesta que se había frenado, a instancias de Lavagna, en julio pasado. El Ministerio de Trabajo ya hizo un estudio con una suba del 10 por ciento.

 Por David Cufré

A doce días de las elecciones, el Gobierno no anunció una suba generalizada de jubilaciones y pensiones, sino que manifestó su esperanza de poder hacerlo “en algunos meses”. Esta vez fue el propio Néstor Kirchner quien generó expectativas de un eventual incremento universal, al destacar ayer en un acto de campaña en Mar de Ajó que durante su gestión se otorgaron “ocho aumentos” de la mínima. “Espero que en algunos meses podamos decir que es para toda la línea de jubilados”, agregó. Las áreas del Poder Ejecutivo involucradas en el tema se sacudieron al escuchar al Presidente, pero coincidieron en que “hay que esperar” hasta que exista una decisión en firme.
Las manifestaciones de Kirchner fueron hechas en un tono que quedó a mitad de camino de la expresión de deseos y el anticipo de una buena noticia. Que hayan sido formuladas durante un acto electoral también agitó el panorama. Más allá de las dudas sobre si existe o no real voluntad política de conceder el aumento, Página/12 pudo saber que el Ministerio de Trabajo tiene listo desde hace tres meses un estudio completo sobre los costos y la incidencia de un ajuste generalizado. El ejercicio fue preparado con una hipótesis de suba del 10 por ciento.
La propuesta también se analizó en la Anses, pero quedó archivada en julio pasado luego de que este diario revelara la noticia. En aquella oportunidad fue Roberto Lavagna quien se opuso a la medida, por temor a la inflación. El ministro estimó que era peligroso disponer un aumento universal en momentos en que existían riesgos de una espiralización de precios. El jefe de Economía expuso su visión al regreso de un viaje de China, cuando la cartera laboral y la Anses ya tenían todo listo para los anuncios. Curiosamente, Kirchner volvió sobre el tema el mismo día en que Lavagna partió rumbo a ese país.
En la pulseada anterior, el Presidente le dio la razón al titular de Hacienda y retó en público a los funcionarios que, según dijo, buscaban su lucimiento personal. Sin embargo, en esa ocasión también sostuvo que no debía descartarse el incremento “para más adelante”. Ayer fue un poco más directo. El Presidente intercaló el tema de los jubilados en un discurso de campaña (ver aparte). Primero recordó que en los últimos años se concedieron “ocho aumentos” del haber mínimo, que pasó de 200 a 390 pesos. Y luego indicó que espera que “en algunos meses” el Gobierno pueda dar un aumento “para toda la línea”.
Se trata de un insistente reclamo de los jubilados que cobran por arriba de la mínima. Son quienes sufren plenamente el impacto de la devaluación. Quienes ganan hasta 1000 pesos tuvieron una sola recomposición del 10 por ciento desde la caída de la convertibilidad, mientras que aquellos que se encuentran por arriba de ese nivel permanecen con sus haberes congelados desde hace más de 13 años. Desde diciembre de 2001 a la fecha, los precios minoristas subieron un 67 por ciento.
La respuesta del Gobierno frente a la protesta de esos jubilados es que se privilegia a quienes se encuentran en la base de la pirámide salarial. Esa política llevó a que del 16 por ciento de los jubilados que cobraban la mínima cuando ésta era de 150 pesos se haya pasado al 70 por ciento que actualmente percibe 390 pesos. Eso también da lugar a quejas de quienes aportaron durante su historia laboral para cobrar más que el haber más bajo y hoy se encuentran en esa base.
Para colmo, el último retoque de la mínima fue no remunerativo. Desde septiembre el ingreso de bolsillo pasó de 350 a 390 pesos, pero los 40 de aumento no fueron incorporados a la jubilación y no cuentan para la liquidación del aguinaldo. Lavagna propuso ese esquema para no comprometer mayores erogaciones fiscales y Kirchner lo aceptó. En función de esa lógica, especialistas en temas previsionales especulaban ayer que habrá que esperar bastante hasta que el Gobierno se decida a elevar todas las jubilaciones.
La Anses prefirió no dar una opinión oficial sobre las declaraciones de Kirchner. En lugar de ello, entregó un comunicado informando las fechas de liquidación de los haberes. Quienes ganan hasta 400 pesos cobran desde ayer hasta el 24 de octubre entre 400 y 1000 pesos desde el 25 al 31 de este mes y por arriba de 1000 pesos, del 1° al 5 de noviembre.

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Los jubilados que cobran por arriba de la mínima son los más afectados por la devaluación.
 
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