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El presidente venezolano, Hugo Chávez, aseguró ayer que la huelga general para sacarlo de la presidencia ha fracasado. El paro cumplió ayer 28 días consecutivos y fue celebrado por la oposición con una “Marcha de la Victoria” de miles de personas en Caracas. En el acto, dirigentes antichavistas leyeron el “Manual de desobediencia civil”, que llama a la población a no reconocer al gobierno de Chávez, no pagar impuestos y desobeceder a las autoridades. Según la oposición, este régimen de desobediencia durará hasta el 2 de febrero, cuando se realice un referendo consultivo no vinculante para decidir si el presidente se queda o se va.
En su último programa de televisión del año, Aló, presidente, Chávez aseguró que la crisis de la industria petrolera está dominada y que se reanudó la producción de nafta y gas doméstico. El presidente pidió a la justicia venezolana que actúe contra los gerentes que paralizaron el grupo estatal petrolero PDVSA y le asestaron “una puñalada trapera” al pueblo de Venezuela, que desde que empezó el paro sufre una fuerte escasez de combustible. También insistió con que no lo van a poder derrocar con métodos antidemocráticos y que no abandonará al pueblo que lo votó en dos ocasiones. Además, confesó que el sábado estuvo tentado de hacerle una broma a la oposición para el día de los Inocentes. Quería salir por radio y tevé anunciando su renuncia, pero sus asesores lo disuadieron.
Mientras una multitud marchaba desde nueve puntos de la ciudad de Caracas para exigir su renuncia, los dirigentes opositores explicaron a los manifestantes los alcances del artículo 350 de la Constitución Nacional, que consagra el desacato de los ciudadanos frente a un régimen contrario a la democracia. La “desobediencia civil” fue anunciada el viernes por el líder opositor Carlos Ortega como una “nueva etapa” del paro general contra el gobierno, que se mantendrá hasta el 2 de febrero, cuando se realice un referéndum consultivo sobre el mandato de Chávez. Según un vocero opositor, la “desobediencia” será no pagar impuestos y desobedecer a las autoridades.