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El hombre, un ciudadano noruego, se calzó un paracaídas y se arrojó desde el segundo piso de la torre Eiffel. La idea era protagonizar un corto publicitario para una marca de ropa deportiva. Pero el dispositivo no se activó y el hombre se estrelló contra el primer piso de la torre, 55 metros más abajo: falleció instantáneamente. De acuerdo con lo informado por la policía francesa, el grupo de noruegos que filmaba el corto no tenía el permiso necesario. Los dos que esperaban filmar el descenso fueron detenidos.
El hecho ocurrió el lunes a las 22, cuando todavía rondaban los visitantes en la torre. Ahora, los dos noruegos detenidos esperan el momento de declarar ante la policía para dar más detalles. Curiosamente, pocas horas antes, los servicios de seguridad había detenido a cuatro hombres, también de nacionalidad noruega, cuando intentaban arrojarse en un paracaídas desde la Torre Montparnasse. Aparentemente, tenían el mismo objetivo: grabar un anuncio publicitario para una marca de ropa deportiva.