EL PAíS › EL DUHALDISMO VOTA TODO LO QUE QUERIA SOLA

Mucho ruido y pocas nueces

Al cierre de esta edición, la Cámara de Diputados bonaerense se aprestaba a aprobar el veto al Presupuesto provincial y empezaría la puja por definir la nueva previsión de gastos. Triunfo felipista.

 Por Miguel Jorquera

Finalmente hubo fumata blanca. La Legislatura bonaerense aprobó anoche el veto del gobernador a la Ley de Presupuesto y la adhesión de la provincia al Programa de Financiamiento Ordenado (PFO) que reclamaba el gobierno nacional. El duhaldismo debatió puertas adentro durante toda la jornada cómo presentar su rendición sobre un reclamo que habían defendido a capa y espada y que derivó en feroz enfrentamiento político e institucional con Felipe Solá. En tanto, sus “compañeros felipistas” se atrincheraron en la Cámara de Diputados en una larga y tediosa espera ante la posibilidad de arribar a un acuerdo para sesionar. La disputa continuará cuando Felipe Solá deba consensuar con los legisladores que responden al ex presidente el “nuevo” proyecto presupuestario.
La resolución del conflicto sorprendió a los felipistas, que recién se encontraron con las autoridades de la cámara y de la bancada del PJ a las nueve de la noche en la reunión de Labor parlamentaria. Allí el duhaldismo les comunicó su decisión de convertir en ley la incorporación de Buenos Aires al PFO, que desde la semana pasada tenía media sanción del Senado, y la aprobación del veto del gobernador al presupuesto que ellos mismos habían modificado, cercenándole distintas atribuciones a Solá.
El anuncio oficial y sin demasiados comentarios lo hizo el propio jefe de bancada, Juan Garivotto, que les comunicó a los felipistas cuál era “la decisión del bloque” que “ellos debían acompañar”. Claro que la decisión exigió a los legisladores duhaldistas extensos debates durante toda la jornada de hoy e infinidad de reuniones partidarias a lo largo de toda una semana en varias de las sesiones electorales de la provincia.
El propio Eduardo Duhalde se reunió esta semana en Lomas de Zamora con sus principales lugartenientes. Junto al presidente del PJ provincial, José María Díaz Bancalari, el diputado nacional Alfredo Atanasof, el intendente de Tres de Febrero, Hugo Curto, y su esposa Chiche, Duhalde pulió la determinación de claudicar, por ahora, su pelea territorial e institucional con Felipe para no entrar en una espiral que lo llevaría a enfrentarse con el presidente Néstor Kirchner, que le pidió no mezclar la cuestión institucional con la disputa partidaria. Curto fue el encargado de transmitir la novedad a legisladores e intendentes de primera sección electoral en un asado realizado el martes en Hurlingham.
Pero las discusiones más acaloradas se dieron ayer hacia adentro del propio bloque de diputados. Ahí, varios legisladores cuestionaron duramente a la conducción de la cámara y de la bancada que los “arrastró a una pelea sin retorno” en la que ahora aparecerán “como los perdedores”. Quienes tímidamente en algún momento de la disputa sugirieron, “sin ser escuchados”, una actitud más negociadora fueron los más duros a la hora de expresar sus críticas, especialmente hacia Osvaldo Mércuri y Garivotto.
Durante toda la jornada, el felipismo presionó a los legisladores rebeldes. “No quiero ser un gobernador de segunda y tampoco co-gobernar. Quiero tener un presupuesto que no tenga diferencias centrales en cuanto a mi capacidad para gobernar como lo tuvieron otros mandatarios”, dijo el gobernador al terminar un acto oficial en La Plata. “Si dicen que me apoyan que lo digan, y si hay un bloque justicialista debe ser oficialista y apoyar al gobernador”, insistió Solá, para luego agregar que “si están en la oposición que también se diga, esto es así, blanco o negro”. Aunque como prenda de unidad Solá afirmó: “Yo no quiero la ruptura”.
El intendente platense, Julio Alak, un aliado de Solá, apuntó directamente “al jefe” de “la oposición”: “Si Eduardo Duhalde mañana da la directiva de que el presupuesto se aprueba, yo le garantizo que todos los legisladores del duhaldismo van y aprueban el proyecto de presupuesto del gobernador”. Después del acuerdo y mientras bajaban al recinto, pasadas las diez de la noche, los diputados felipistas se mostraron más prudentes y prefirieron no calificar la actitud de sus compañeros de bancada: “Ahora vamos a votar, mañana será el día de las conclusiones”, dijeron a Página/12.

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El presidente Néstor Kirchner y el gobernador Felipe Solá, juntos en un acto en Quilmes.
 
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