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Estuvo todo el gabinete, pero la UIA movilizó hasta el último afiliado

El acto fue tan breve como el espacio, que quedó chico para la cantidad de empresarios que dijo presente. Un abrazo con Kirchner y Cristina que marcan pertenencia.

En medio de un Salón Blanco absolutamente colmado por empresarios, sindicalistas y funcionarios, el presidente Néstor Kirchner le tomó anoche juramento a Miguel Peirano como ministro de Economía. La ceremonia, que se inició poco antes de las 19.30, no demoró más de cinco minutos, cumpliendo apenas con los ritos de rigor en estos casos.

Peirano juró “por Dios y la Patria” y luego se fundió en un fuerte abrazo con el presidente Kirchner y la senadora Cristina Fernández. Al finalizar el acto, el flamante ministro mantuvo una reunión con el Presidente por espacio de 30 minutos en el despacho presidencial y luego se retiró de Casa de Gobierno sin formular declaraciones.

El Salón Blanco no se utilizaba para este tipo de ceremonias desde hace aproximadamente un año, ya que estaba cerrado por reformas edilicias. Ayer, su capacidad quedó absolutamente desbordada, obligando a muchos invitados y periodistas a seguir el acto desde afuera.

La ceremonia no duró más de cinco minutos. La mayor atención de los concurrentes se centró en reconocer a quienes estaban presentes. Entre los gobernadores, se destacó la participación de José de la Sota (Córdoba) y José Luis Gioja (San Juan). La nutrida concurrencia empresaria estuvo compuesta, entre otros, por el presidente de la UIA, Juan Carlos Lascurain; el titular del Grupo Techint, Paolo Rocca; el presidente de la Bolsa de Comercio, Adelmo Gabbi; el titular de Volkswagen Argentina, Victor Klima; el presidente de la Sociedad Rural Argentina, Luciano Miguens, y por el titular de Fiat Argentina, Cristiano Ratazzi.

Por el sector sindical dieron el presente el secretario general de la CGT, Hugo Moyano, y el jefe de la federación que nuclea a los trabajadores de obras sanitarias, José Luis Lingeri.

También estuvieron en el acto la totalidad de los funcionarios del Ministerio de Economía que acompañaron la gestión de Miceli. Entre ellos, el secretario de Hacienda, Carlos Mosse; de Programación Económica; Oscar Tangelson, y de Finanzas, Sergio Chodos, además del secretario de Agricultura, Javier de Urquiza.

Junto con Kirchner y su esposa, participaron del acto de asunción de Peirano el vicepresidente de la Nación, Daniel Scioli; el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, y el flamante vicejefe, Jorge Rivas.

Scioli respaldó la designación de Peirano y destacó sus cualidades como especialista vinculado con la industria. Poniéndose el traje de candidato, el vicepresidente dijo del nuevo ministro de Economía que “es un hombre que tiene una gran vocación por algo muy caro a lo que es la mecánica productiva de la provincia de Buenos Aires: la industria”. Scioli se mostró satisfecho por la designación de Peirano “con quien venimos trabajando en conjunto” y precisó que con el designado ministro de Economía “hemos compartido diferentes encuentros en distintos puntos de la provincia y el país”.

Peirano reemplaza en el cargo a Felisa Miceli –quien no estuvo presente en el acto de jura en Casa de Gobierno–, tras la renuncia presentada por la funcionaria acosada por la causa en la que se investiga el hallazgo de un sobre con dinero en el baño de su despacho. Durante la conferencia de prensa en la que participó ayer por la mañana, prácticamente despidiéndose de su cargo de secretario de Industria, destacó la existencia de una política en el Gobierno que apunta a generar “una industria fuerte y moderna que compatibilice mercado interno y exportaciones”.

Afuera, casi un centenar de empresarios, ataviados de traje y algunos con sobretodo, seguían como si pudieran oír o presenciar el acto de asunción de un viejo conocido. Por suerte, ayer el clima ayudó y no hizo tan dura la espera. “Está toda la UIA, desde los más encumbrados hasta el representante de la cámara empresaria más chica que haya pasado por la entidad en los últimos quince años”, describió un viejo conocedor de los pasillos de la central fabril. Resignados a no encontrar lugar en el interior, el nutrido núcleo de hombres de industria optó por quedarse hasta el final, confiando en la posibilidad de saludar a un viejo amigo, el joven economista de la UIA que llegó a ministro.


Tangelson siempre está

El ya inoxidable secretario de Política Económica, Oscar Tangelson, que permaneció en su cargo pese a los sucesivos cambios de ministros desde Jorge Remes Lenicov, Roberto Lavagna, Felisa Miceli y ahora Miguel Peirano, afirmó ayer que el nuevo titular del Palacio de Hacienda tendrá el desafío de “profundizar esta fuerte vocación de producción y de trabajo que el presidente Néstor Kirchner ha impuesto a la vida política”. Opinó que el recambio por Felisa Miceli “permite prever la consolidación de un proceso sustentado en el desarrollo económico”. Tangelson consideró que Peirano “ha dado muestras –a lo largo de su vida profesional– de un fuerte compromiso con el desarrollo productivo, industrial y agrícola”.

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La masiva asistencia empresaria dejó afuera del Salón Blanco a muchos invitados.
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