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Tras la caída de una línea de aerosillas en un centro de esquí de Villa La Angostura, renunció el gerente general de la empresa Cerro Bayo SA, la firma encargada de los medios de elevación en ese monte. Mientras las personas que resultaron heridas en el incidente evolucionan de manera favorable, se supo que el año pasado descarriló una aerosilla, aunque en esa oportunidad las sillas no cayeron a tierra. Aún no se conocen los resultados de las pericias realizadas en el lugar.
El accidente del sábado provocó en Juan Pablo Díaz “un estrés muy grande”, según indicó en el texto de su renuncia. El ex gerente expresó que no está en “condiciones de continuar con la temporada después de las tensiones vividas” por la caída de la aerosilla Chaltén. Por otra parte, señaló: “No tengo ningún reclamo a la empresa. Al contrario, cuando planteé mi deseo de renunciar me ofrecieron otra salida, como una licencia. Pero no tengo ánimo para continuar”.
En tanto, el intendente de Villa La Angostura, Hugo Panessi, aseguró que “evolucionan favorablemente” las ocho personas internadas, entre ellas, un chico brasileño de 7 años. Asimismo, Panessi afirmó que la línea de aerosillas “estará clausurada toda la temporada” invernal.
En cambio, los otros medios de elevación podrían volver a habilitarse en las próximas horas, ya que la municipalidad aguarda los informes técnicos del gobierno neuquino y la empresa Cerro Bayo para levantar la clausura preventiva. La aerosilla Chaltén está afectada a la causa judicial que instruye la jueza Norma Galván de Junín de los Andes.
El intendente también opinó que el accidente pudo deberse al “agotamiento de algún material”, pero aclaró que eso “no lo podemos decir hasta que no esté el informe” de los peritos que realizaron trabajos en la zona desde el domingo. “La Justicia tendrá que expedirse sobre si hubo o no mantenimiento” de la aerosilla accidentada, agregó Panessi.
El 18 de agosto de 2004, otra de las aerosillas descarriló. Sin embargo, el cable quedó firme en las torres y las sillas no se cayeron. Ese día se debió evacuar a 17 pasajeros de la aerosilla, según recordó Díaz. El accidente se habría producido por un exceso de peso en el carro de carga de la aerosilla, lo que hizo caer el cable de acero tres centímetros hasta una de las “alas” antidescarrilamiento que hay en una de las torres.
En ese momento se activó un sistema de seguridad que detuvo la aerosilla. Entonces el personal de la empresa bajó a los pasajeros de las sillas manualmente. Luego se volvió a encarrilar el cable y a encender la aerosilla. De acuerdo con el testimonio del ex gerente de la empresa Cerro Bayo, el procedimiento “es el usual para estos casos”, y agregó que se “realizó sin ningún tipo de inconvenientes”.