espectaculos

Sábado, 27 de septiembre de 2008

CINE › ULTIMA JORNADA EN EL FESTIVAL DE SAN SEBASTIáN

Final con suspenso en Donostia

Hoy será el anuncio de los premios, con la habitual expectativa para las películas argentinas, ya que no sólo El nido vacío, en competencia, aspira a ellos. En Horizontes Latinos, La rabia, Leonera y La sangre brota están en condiciones de recibir alguno.

 Por Horacio Bernades

Desde San Sebastián

Días argentinos en San Sebastián. El anuncio de las elegidas para representar al país en los Oscars y los Goya se siguió con lógica expectativa al borde del Cantábrico, habida cuenta de que los mayores candidatos a ambas postulaciones estaban aquí con sus películas. Desde Pablo Trapero hasta Leonardo Favio, pasando por Daniel Burman. Mientras que al realizador de Leonera no le resultará indiferente la nominación al Oscar, dado que es la primera de sus películas en recorrer ese camino, la candidatura de Aniceto a los Goya suma un halago a los que su autor sigue recibiendo aquí, donde ha tenido una suerte de presentación pública. Por extraño que suene, hasta ahora en España Leonardo Favio era un virtual desconocido, por lo cual aquí es casi como si Aniceto fuera su ópera prima.

Para Burman deben haber sido horas de cierta esquizofrenia, teniendo en cuenta que se le superpusieron las exhibiciones de El nido vacío –una de las dos últimas en presentarse en competencia oficial, junto con Dream, la nueva de Kim Ki-duk– con la definición del tema Oscar en Buenos Aires. Habrá tenido la cabeza tan partida como el abrazo de una de sus películas anteriores. Igual, en la conferencia de prensa brindada inmediatamente después del pase de prensa matinal, se lo veía tan chistoso y relajado como de costumbre (se sabe que Burman es, junto con Andrés Di Tella, uno de los grandes comediantes espontáneos del cine argentino). Ladeado por un virtual ejército, con su socio Diego Dubcovsky y el coproductor español José María Morales por coroneles –y Cecilia Roth, Arturo Goetz e Inés Efron oficiando de capitanes generales–, el realizador de Derecho de familia afrontó preguntas de la prensa local, apuntadas sobre todo a la condición de alter egos de sus protagonistas, al tono cómico-dramático de sus películas, a la relación entre padres e hijos y hasta posibles vinculaciones entre el viaje por la imaginación que plantea El nido vacío y las últimas novelas de Paul Auster.

Con los tres actores tirándole flores, Burman manifestó su interés por “los pequeños corrimientos hacia la fantasía, con los que uno afronta el aburrimiento cotidiano”, hizo votos por la idea aristotélica del artista (que privilegia el arte como oficio) frente a la visión sacralizadora, que identificó con el renacentismo, y reconoció (o bromeó) que, llevado por el crecimiento progresivo de sus protagonistas, no descarta la idea de llevarlos hasta la muerte, matándose eventualmente a sí mismo como cineasta.

Como si se hubiera convertido en uno de los maltrechos protagonistas de sus primeras películas, un accidente automovilístico tiene postrado al coreano Kim Ki-duk en un hospital de Seúl. “Ganar el Premio del Público por Primavera, verano... y el Premio Fipresci por Hierro 3, así como la inclusión de El arco en competencia oficial dos años atrás, hacen que el Festival de San Sebastián sea muy importante para mí”, dice el realizador de La isla en una carta enviada a las autoridades del evento, pidiendo disculpas por su obligada ausencia. Ausencia que motivó que la rueda de prensa se celebrara por teleconferencia, tal como había sucedido dos años atrás con el fóbico Lars von Trier, que se niega a viajar en avión. Como es común en Kim Ki-duk, Dream surge de una de esas ideas que pueden resumirse en una frase. “Un hombre sueña cosas que una mujer realiza”, sería la idea en este caso. Idea digna de Borges, a la que KKD le da un desarrollo romántico-esotérico-torturado. El comienzo es intrigante, ya que hasta que las cosas se aclaran resulta difícil dilucidar qué relación hay entre el protagonista que sueña y una chica, sonámbula, que concreta los sueños de aquél. Así como entre sueños y realidades. La intriga se diluye en la medida en que las cosas se aclaran, se vuelve forzada cuando los protagonistas se ponen tan autodestructivos como los de las primeras películas del autor, y francamente kitsch cuando KKD termina adscribiendo, en la última imagen, a una versión fantástica de “El amor es más fuerte”. Lo cual representa el paso de una monoidea a otra, confirmando la progresiva e implacable pérdida de interés del cine de KKD.

Describiendo una curva contraria a la carrera de Kim Ki-duk, la competencia oficial del 56º Festival de San Sebastián pareció confirmar que los tiempos de molestia, bufidos y vergüenzas ajenas quedaron en el pasado. Después de que la calidad de las películas tocara fondo un par de ediciones atrás, en 2007 se había advertido una mejoría que ahora no hizo más que confirmarse. No es que la competencia haya sido una maravilla, y hasta es posible que haya presentado una única gran película: Aruitemo, aruitemo, de Hirokazu Kore-eda. Pero no es ahí donde hay que buscar la diferencia (la situación no es muy distinta en los restantes festivales internacionales), sino en la reducción al mínimo de las películas malas, con una media de películas aceptables. Por otra parte, si lo que producen nombres consagrados como Samira Makhmalbaf, Michael Winterbottom o el propio Kim Ki-duk no está a la altura de su reputación, no es culpa de San Sebastián sino del cine mismo.

Hoy será el anuncio de los premios en todas las secciones, con la habitual expectativa para las películas argentinas, ya que no sólo El nido vacío aspira a ellos. Todas las incluidas en la sección Horizontes Latinos (La rabia, Leonera, La sangre brota) están en condiciones de recibir alguno, lo mismo que la ópera prima Amorosa soledad, que lo hizo en Zabaltegui. La premiación de este festival suele ser muy benévola con el cine argentino. Habrá que ver si también este año se cumple la tradición.

Compartir: 

Twitter

José María Morales, Cecilia Roth y Daniel Burman, la plana mayor de El nido vacío.
Imagen: EFE
SUBNOTAS
 
CULTURA Y ESPECTáCULOS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.