A CAPELLA

Bobby McFerrin : El cantante e improvisador neoyorquino se hizo famoso gracias a “Don’t Worry Be Happy”, pero aquel hit funciona apenas como puerta de entrada a un mundo en el que caben también Mozart, Los Beatles, músicas étnicas y cuanta cosa vibre cerca o lejos. Quienes vayan a verlo mañana al Gran Rex deben saber que el objetivo artístico de McFerrin es, desde siempre, “comunicar alegría al público”.

Por Santiago Giordano