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Decir lo que se les canta

Martes de poesía y música: Un ciclo que muestra la poesía del rock y el rock de la poesía.

No es casual. La letra de determinadas canciones se queda aferrada fácilmente a la memoria y, al oírlas, todo es cerrar los ojos y viajar. Lo mismo, exacto pero al revés, pasa con el ritmo de muchos poemas: versos que canturrean, párrafos que entonan. Es que la música y la poesía son parientes de sangre. Los que lo sabían dirán que sí y los que no ahora pueden ir a comprobarlo. Desde marzo, el último martes de cada mes, es posible ver este ameno y mágico encuentro familiar.

El plan es simple: un músico de trayectoria elige a un reconocido poeta para compartir la velada y, juntos, dar una nueva visión, brindar una relectura de la obra de ambos. En la práctica, resulta así: es un recital acústico de música y poesía en el austero pero coqueto auditorio de la sede de la calle Paraná del Centro Cultural de España en Buenos Aires.

Coordinado por el periodista Martín Pérez, un músico presenta a un poeta y un poeta presenta a un músico. Y, aunque cada uno hace lo suyo, los caminos, inevitablemente, se cruzan. Ariel Minimal y Fabián Casas en marzo, Rosario Bléfari y Beatriz Vignoli en abril, Manuel Moretti y Horacio Fiebelkorn en mayo y Fernanda Laguna y Pablo Dacal en junio fueron los dúos que ya se subieron a escena.

Ahora es el turno de Leo García y Fernando Noy. Un interesante cruce entre el cantante que hace hits como “Morrissey” y el autor de los potentes poemas de “El poder de nombrar” y “Dentellada” (que además se anima a actuar con Luis Ortega y a componer la letra de “Maricel”, del disco Hija del rigor, para Fabiana Cantilo).

Cuando todavía falta mucho para el fin de semana y ya se acabó la alegría del sábado, música y poesía para terminar la jornada laboral: es como mirar por una ventana que da a un paisaje inmenso.

El próximo martes de poesía y música es el 27 de julio a las 7 de la tarde en el Centro Cultural de España en Buenos Aires (Cceba), que queda en Paraná 1159. La entrada es gratis.

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Cofradía de poetas

La Liebre: Multiespacio de arte y libros con celebración constante a Mangieri, su poesía y su trabajo.

Desde el 5 de marzo, en una bella casita de San Telmo, funciona un multiespacio que se basa en tres actividades centrales: la distribuidora editorial 5P (cinco pantalones), la galería de arte y la librería. Es un plan muy en serio, pero nada formal. Fernanda, Luli, Darío y Simón, las mentes y cuerpos detrás y al frente de este emprendimiento, dicen: “Estamos felices. Hacemos lo que queremos. Haremos lo que queramos”.

Aunque sólo esa declaración sería suficiente para mantener unida tanta actividad, hay un plus. El espíritu de José Luis Mangieri —editor, mecenas, imprentero, poeta, apasionado— sigue vivo gracias a la inspiración de estos cuatro arengadores culturales que lo honran, lo nombran, lo vuelven a traer después de la muerte al centro de este proyecto de difusión cultural.

El corazón de todo esto es, sin duda, las tertulias que se realizan cada miércoles, más o menos a las 19.30, en el segundo piso de la casa. Hay lecturas y charlas alrededor de la obra editorial de Mangieri con invitados líricamente estelares. Para arrancar, ofrecen té y café, pero como nunca se sabe cuándo termina, hay una parrilla prendida, en pleno uso y con vía libre para que quien quiera tire algo a las brasas. Por sobre todo, tanto los miércoles como el resto de los días, el lugar es una librería. Y cuenta con una gema: tiene el remanente de todas las editoriales de Mangieri. O sea: En La Liebre, y en casi ningún otro lado, se pueden encontrar libros de los sellos La Rosa Blindada, Libros de Tierra Firme, Homo Sapiens, Horizonte y Calden ordenados en pilas, por título.

Amigable, poética, inspirada y con las puertas literalmente abiertas, la casita de San Telmo es un lugar en el que eternamente hay encuentros, gente, planes, proyectos. Todo alrededor de Mangieri y “sus recuerdos recientes y nostálgicos, los cuentos, su poesía, sus chistes, su vida, su estilo”, dicen los cuatro amigos que un día tuvieron la gran idea de crear La Liebre.

La Liebre queda en Bolívar 646, está abierto casi siempre; para consultas sobre material, horarios y demás, comunicarse al 4343-5328 o en [email protected]

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Esquina lírica y surrealista

Bar La Poesía: Floreció en los ’80, cerró 20 años y ahora volvió para instalarse como un clásico.

La Poesía: bar de arte, café literario, esquina de encuentro. Así rezaba el cartel original del cafetín de Chile y Bolívar cuando abrió el 12 de abril de 1982 y mucho de eso fue lo que pasó hasta septiembre de 1988, cuando cerró. Pero veinte años no es nada y, después de dos décadas, volvió un poco remixado, pero igual de lindo y cálido. Hoy es uno de los nuevos clásicos del barrio, punto obligado de encuentro.

Licuados, comida, tragos y un ambiente que invita tanto al encuentro como a la solitaria y bucólica tarea de la escritura sobre sus mesas amplias de madera. Antiguo reducto de cultura popular que supo congregar a creadores de la música, la literatura y la poesía de la generación de los ‘60 y también les brindó espacio a las nuevas que venían asomando y hoy son clásicos.

La Poesía fue el lugar elegido por el movimiento poético de 1983, junto al renacer de la democracia. En La Poesía se fundó el Grupo de los 7 (Chihade, Derlis, González, Dellepiane Rawson, Selles, Suárez y Vázquez), una de las primeras uniones de poetas para llevar adelante lecturas y debates. En La Poesía se concretaron ciclos memorables de poesía lunfarda, literatura policial y jazz.

Ahora, sentarse en La Poesía, cerca de una ventana, es como viajar en el tiempo. En aquella época dorada, uno de sus dueños fue el poeta y escritor Rubén Derlis; el músico Dystor Pérez tocaba el piano y en sus mesas recalaban los poetas y escritores Horacio Ferrer, Isidoro Blaisten, Juan Gelman, Paco Urondo, Horacio Salas, Humberto Costantini, el jazzero “Mono” Villegas y el violinista Hernán Oliva.

Hace ya dos años, la gran reapertura fue llevada adelante por Pablo Durán y Laura Carro, quienes también tienen otros tres Bares Notables de particular impronta como el Café Margot, El Federal y Bar de Cao. Las actividades culturales que ahora encuentran espacio en el bar, están bajo la dirección y responsabilidad del actor, autor y documentalista Leonardo Busquet.

Bar La Poesía queda en Chile 502 y está abierto todos los días de 9 de la mañana hasta la medianoche.

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Laberinto de papel

Poema 20: Librería anticuaria con más de 5 mil libros y fotos a disposición del público.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche. / Escribir, por ejemplo: “La noche está estrellada,/ y tiritan, azules, los astros, a lo lejos”. / Esos son los famosísimos primeros versos de “Poema 20”, del icónico libro Veinte poemas de amor y una canción desesperada de Pablo Neruda. Pero Poema 20 es, también, una bonita, discreta y completísima librería anticuaria enclavada en el microcentro porteño, justo enfrente de una de las librerías más antiguas del país, L’Amateur, fundada en 1926.

Desde afuera, el local parece chico y la calle Esmeralda, tan finita y superpoblada de colectivos, ayuda a creer que el ruido a motor y bocinas invadirá todo. Pero se abre la puerta de vidrio, pesada, suena una campanita y nos golpea un intenso y delicioso olor a libro antiguo. Tiene un dejo como a almendra y otoño. Pasa un muchacho con café recién hecho que se suma al festival de aromas. Reina el silencio.

Adentro todo es acogedor. El lugar entero es estanterías repletas: el dueño de la librería, Diran Sirinian, es un amante y coleccionista de libros y fotografías antiguas. Hay más de 5 mil ejemplares de todo tipo, de todas las épocas, de todos los temas. Joyas de papel. Buenos Aires tiene una tradición centenaria en librerías anticuarias y, entre las aproximadamente 20 que hay actualmente, Poema 20 se destaca en su reducto céntrico desde 2001 con sus fotografías del siglo XIX y XX, mapas, libros ordenados al detalle y catalogados por áreas para la fácil consulta (literatura, material autógrafo, manuscritos, ilustrados).

Miembro de la Asociación de Libreros Anticuarios de la Argentina (Alada), Sirinian es uno de los impulsores y participantes más activos de la Feria del Libro Antiguo, que ya va por su quinta edición y se realiza todos los años. Ahí se reúnen todos estos locos, amantes de primeras ediciones e inhallables de todo tipo y, durante tres días, juntan todos sus libros antiguos, raros y coleccionables. Poesía pura para el bibliófilo.

Poema 20, librería anticuaria, queda en Esmeralda 869 y está abierta de lunes a viernes de 9 de la mañana a las 8 de la noche.