Los radicales insisten que si en 2007 el candidato del Frente Progresista fue Hermes Binner, en 2011 la fórmula debería ser encabezada por un radical. Y ellos ya tienen el nombre: el intendente de Santa Fe, Mario Barletta. Pero los socialistas no opinan lo mismo. "No hay ningún pacto de alternancia con la UCR", advirtió ayer el ministro de Gobierno y Reforma del Estado, Antonio Bonfatti, quien goza de la preferencia de su jefe para sucederlo en la Casa Gris el año que viene, aunque haya otros anotados: el senador Rubén Giustiniani y el intendente de Rosario, Miguel Lifschitz. La puja por las candidaturas disparó también otra controversia en el oficialismo sobre el método para definirlas. "Lo mejor sería el consenso porque evita esas rispideces que siempre quedan después de un proceso electoral", dijo Bonfatti. En cambio, los radicales amagan con forzar una interna en la confianza que el aparato partidario podría doblegar al socialismo en la provincia e imponer a Barletta. "Nadie va a regalar nada", ya avisó el presidente de la UCR, Hugo Marcucci.

Con Binner de viaje a los Emiratos Arabes, Bonfatti lo reemplazó ayer en los actos oficiales en la Casa Gris. Y después, ensayó algunas definiciones políticas sobre las dos demandas de la UCR: institucionalizar el Frente Progresista y una alternancia en los candidatos para que la próxima fórmula en 2011 sea encabezada por un radical: Barletta. "¿Está acordado con el radicalismo una alternancia en los candidatos de la fórmula a gobernador y vice? ¿Hay un pacto entre ustedes?", le preguntaron al ministro.

No, de ninguna manera. Nunca fue así respondió Bonfatti.

Entonces, ¿de qué manera van a definir las candidaturas?

Lo vamos a ver hacia fin de año o principios del año que viene. Yo, personalmente, creo que la mejor forma es por consenso porque evita esas rispideces que siempre quedan después de un proceso electoral explicó . "Hay que tratar de encontrar un equilibrio y un consenso. Obviamente, existe la ley de las (elecciones) primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias, pero en mi apreciación las internas siempre dejan huellas difíciles de borrar. Y, por otro lado, tratándose de un Frente, queda aquél que pierde la interna excluido de poder participar con gente muy valiosa de un proyecto. No descartamos la primaria, pero creo que lo mejor será lograr un consenso".

Bonfatti dijo que el socialismo está dispuesto a avanzar en la "institucionalización" del Frente Progresista como reclaman los radicales, sobre todo Barletta, quien ha insistido mucho en este tema desde diciembre del año pasado. "El tema de la institucionalización del Frente es algo que siempre hemos planteado desde el Partido Socialista. Pero que no se daba porque la UCR estaba intervenida y tuvo que pasar un proceso interno que ha zanjado. Por lo tanto, nosotros estamos dispuestos a que dejemos de ser un frente (electoral), que en definitiva es una mera alianza, para pasar a ser un frente donde tengamos establecidas determinadas pautas de funcionamiento. Mucho más allá de que hacemos reuniones cada quince días y que se discuten todos los temas", sostuvo.

El esquema de la alternancia de los candidatos fue planteado hace dos semanas por el propio presidente de la UCR, Hugo Marcucci, poco después de que Binner señalara a Bonfatti como su elegido para sucederlo. "La necesidad de una alternancia es un razonamiento que no tiene que ver con el socialismo ni con la UCR, sino con la propia dinámica de la política". Porque si no hay rotación en las fórmulas o en las cabezas de listas, "eso empobrecerá al Frente, lo debilitará y en el futuro puede provocar conflictos, al extremo de que sería muy difícil seguir manteniéndolo si no están dadas esas condiciones de la alternancia", explicó Marcucci. Y puso como ejemplo lo que sucede en el Frente Amplio uruguayo y en la Concertación chilena.

"Además, no es bueno para el Frente Progresista que se consolide un esquema donde un solo partido (el socialismo) pueda acceder al cargo o a los cargos más importantes. Eso iría en detrimento del propio Frente, porque el riesgo que se corre es que se consolide la hegemonía de un solo partido", agregó.