"En 48 horas no quedará disponible ninguno de los diez nombres que solicitamos para reforzar el plantel", disparó Caruso Lombardi, entre resignado e incrédulo por la situación que le toca atravesar. La de mayor incertidumbre, junto a la de los días previos al anuncio de su continuidad, y la de máxima tensión para sus aspiraciones de formar un equipo que tenga en su ciento por ciento su propio sello. Y esto ocurre, principalmente, por la falta de dinero que se evidencia en la institución, y por la salida de la escena del presidente Eduardo López, quien vivió días complicados debido a un problema de salud que lo obligó a replegarse de la mesa de las negociaciones.

Ñuls ingresará hoy en su segunda semana de trabajo de pretemporada y los diez refuerzos que el técnico rojinegro, como anticipó a Rosario/12 hace una semana eran una necesidad para tener dos futbolistas por puesto están lejos de arrancarle una nueva sonrisa. Como contrapartida varios jugadores dejaron el club y otros ya dejaron en claro que seguirán el mismo camino por no tener el respaldo del entrenador.

Desde Paraguay, un dirigente Cerro Porteño que pidió reserva, aseguró que esperan la confirmación de un adelanto en dinero para liberar a Ernesto Cristaldo. Las negociaciones las lleva adelante el empresario Pedro Aldave, quien por estas horas permanece en Argentina para destrabar el nudo que generó el pedido de 9 millones de dólares por el pase de Santiago Salcedo a River.

Del éxito de esta transferencia depende la llegada de refuerzos a Ñuls. Sin dinero y con un pobrísimo nivel de confianza por parte de los clubes extranjeros, la entidad rojinegra busca arribar al mejor acuerdo con los de Nuñez para asegurarse una buena cantidad de billetes que le permitan poner al día al plantel y cuerpo técnico que, según versiones de los propios protagonistas, estarían sin cobrar sus haberes durante los últimos tres meses.

Según fuentes cercanas a la comisión directiva millonaria, River está dispuesto a pagar por el pase del atacante guaraní el 50 por ciento del monto que López pidió en el encuentro inicial. Esto significaría 4.500.000 dólares e, incluso, los porcentajes correspondientes al futbolista y la AFA correrían por cuenta del club comprador.

"Desde hace unos días no hablo con el presidente", aseguró el DT rojinegro ante la pregunta sobre las novedades que podría encontrar tras la jornada libre. Caruso Lombardi perdió sus ganas de hablar y sólo reconoce que "la situación comienza a preocuparme porque a esta altura pensábamos tener algunos jugadores más".

El caso de Marcos Gutiérrez, quien anunció que buscará un nuevo horizonte, abrirá un casillero y en consecuencia deberá sumarse otro arquero para no dejar toda la responsabilidad en Germán Caffa. El ex San Martín de Tucumán tuvo un buen torneo Nacional con el Santo pero la primera división le exigirá desafíos más importantes.