Un recuerdo de juventud asociado a la figura del emblemático Bob Dylan dispara una serie de micro-historias que se transforman en Enter Dylan (bordes, restos y confesiones); obra recientemente estrenada, escrita por el reconocido director rosarino Rody Bertol, que volvió a compartir sus sueños creativos con el dúctil actor Juan Nemirovsky, director del espectáculo que puede verse todos los sábados a las 22 y los domingos a las 20.30 horas en La Manzana (San Juan 1950).

Bertol, creador del legendario grupo Rosario Imagina, se emociona al recordar aquellos momentos que le sugieren una contundente frase del maestro polaco Tadeuz Kantor: "La infancia, aquel lugar del que nunca salimos".

"Esta obra, además de ser un ensayo sobre el amor y la soledad, es también un entrañable homenaje a un gran artista que hizo más feliz mi infancia, e iluminó tanto al mundo con su obra", dijo a Rosario/12 el autor de Enter Dylan.

Por su parte, Nemirovsky considera que la obra es un ensayo sobre el amor y la indiferencia: "A los personajes de estas historias mínimas no los golpean tanto las diferencias con el otro, pero les duele la indiferencia del mundo que los rodea", medita el actor que retorna a la dirección después de su primer experiencia con Heroínas, un raro desfile de mujeres encendidas, sobre otra creación de Bertol.

La propuesta está integrada por 14 monólogos interpretados por 12 actores que intentarán dar cuenta de las desventuras de estas criaturas que ,según el director, "están atravesando un trance crucial en sus vidas, inmovilizados o arrollados por el miedo, miedo a la soledad, y también miedo al amor".

"Lo que más me fascinaba era su imagen, la de un hombre con su guitarra, su armónica y su sombrero, solo enfrentando al mundo: un francotirador. Quizás yo premonitoriamente también me sentía así. Esta obra es un homenaje y es también una manera de transformar aquel pasado y compartirlo", dijo Bertol.

Componen el elenco Germán Capomassi, Sofía Dibidino, Marianela Druetta, Alejandro Ghirlanda, Julián Lasa, María Eugenia Ledesma, Cindi Grüssi, Mariana Pevi, Clara Rajz, Eva Ricart, Natalia Trejo y Lucas Vidoletti; y la dirección es compartida entre Nemirovsky y Simonel Piancatelli.

"Se trata de una sucesión vertiginosa de monólogos, como si fueran canciones de un recital, en un espacio veloz y perturbado; a medida que avanza la secuencia de personajes que dicen su verdad, se va entramando un historia coral; algunos se preguntan: ¿Cómo voy a hacer para seguir?; otros están atemorizados por si el amor es poco, o es mucho", reveló Nemirovsky.

Rodeado de un gran equipo integrado por Simonel Piancatelli en la dirección actoral, Niche Almeyda en la escenografía, y Chavo Ghirlanda en la puesta de luces, el director reconoce que sin ellos no se podría haber llevado este proyecto adelante: "Rosario Imagina es eso, un grupo de gente atrapada apasionadamente por el teatro", definió.

"Caminando con vos en mi cabeza, mis pies están tan cansados, mi cerebro cargado y el cielo nublado.... son las nueve de la mañana y me tomo la primera cerveza y una pastilla de ranitidina", dice el protagonista de "Enferma de amor".

-¿Cómo trasladaste esa vivencia de juventud, al formato teatral?, preguntó Rosario/12.

"Me llevó mucho tiempo escribirla, fue un viaje muy lindo, pero también complicado por la obra descomunal de Dylan, donde recorté a partir de lo que estaba buscando: el tema de el amor y la soledad. Fue un viaje, por las cosas que se movilizan navegando por un océano poético; después encontrar una mirada y una versión propia. Como todo texto, no era el sentido lo que buscaba, sino algo que aparecía sorprendiéndome en el lugar del sentido", dijo Bertol.

Con la experiencia de un creador que se nutrió en las poéticas dramáticas de autores como Strindberg Beckett y de su maestro Alberto Ure, Rody Bertol opina que ya está todo inventado en el teatro, pero nunca descarta la posibilidad de sorprenderse y encontrar algo genuino.