Miércoles, 20 de julio de 2011 | Hoy
CIUDAD › LIFSCHITZ ASEGURA QUE NO "ESTá EN CARPETA" EL AUMENTO DEL BOLETO
Mientras el intendente desestimó un proyecto para incrementar la tarifa de transporte urbano, pese a las presiones del empresario Agustín Bermúdez; las organizaciones de consumidores pidieron que se realicen audiencias públicas.
Por Lorena Panzerini
Con el debate del aumento del boleto de transporte urbano instalado, asociaciones de usuarios y consumidores reclamaron ayer que se realicen audiencias públicas como "herramienta de participación del usuario" previo a cualquier ajuste de tarifa. Al mismo tiempo, el intendente Miguel Lifschitz insistió con que "se intentará resistir" antes de pensar en un nuevo ajuste del precio del boleto, pese a la presión que ejerce el titular de la empresa Rosario Bus, Agustín Bermúdez, para que se analice la situación. Además, luego que anteayer el presidente del Concejo Municipal, Miguel Zamarini, planteara que una vez que se retomen las sesiones, en agosto, se tendría que discutir el tema, concejales de la oposición apuntaron a que "primero deberían cumplirse las mejoras del servicio", que habían sido anunciadas con el último aumento, hace poco más de un año.
La discusión por un posible incremento de la tarifa de colectivo está latente, aunque desde el Ejecutivo aseguran que es un tema que "no está en carpeta". Según Lifschitz, se intentará "resistir" presiones en ese sentido.
El principal interesado en instalar la "necesidad" de la suba es Bermúdez, que la semana pasada envió notas a los ediles de la comisión de Servicios Públicos para reunirse con ellos y presentarles su situación como empresario de Rosario Bus. Su postura es que el boleto debería incrementarse en un 25 por ciento.
Pese a que los concejales opositores aseguraron que se van a escuchar esos planteos, apuntaron directamente a la calidad del servicio. La concejala justicialista Norma López, señaló que "los beneficios que se prometieron al usuario hace más de un año siguen sin ponerse en práctica". En ese sentido, enumeró "la tarjeta inteligente --que está en etapa experimental desde la semana pasada--, el plan de movilidad, la seguridad en el transporte público, la demarcación de las paradas y la mejora del acceso al conocimiento, por parte de los usuarios, de las frecuencias de las diferentes líneas".
Por su parte, el Centro de Estudios Sociales y Acción Comunitaria (Cesyac); la Asociación Ojo Ciudadano; Compromiso Cívico; y la Asociación Protectora de Rosario presentaron ayer en el Concejo Municipal dos propuestas para que el usuario tenga voz en las decisiones que conciernen al transporte público.
Para López, "no está nada mal" la iniciativa de las organizaciones que buscan incluir al usuario en algunas decisiones.
Juan Marcos Aviano, presidente de Cesyac, indicó que los proyectos buscan incorporar al usuario en todos los espacios de decisión sobre el servicio. Uno tiene que ver con "generar espacios de discusión donde se tome en cuenta la opinión del consumidor". "La audiencia pública que estamos proponiendo no es más que una réplica de lo que se hace con otros servicios públicos. Sirve para que los vecinos puedan plantear cómo viven el transporte público", agregó.
Por otro lado, la presentación incluyó una propuesta de modificación de la Ordenanza del Ente del Transporte (Nº 7.627), relacionada con la constitución del Directorio. "Queremos incorporar a los miembros del Consejo Directivo del ente --dos del Ejecutivo municipal, y uno del Concejo-- dos integrantes más, que serían un representante de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) --que ya trabaja en el Estudio de Costos--, y un representante de los usuarios del servicio", detalló Aviano, quien apuntó que el objetivo de las organizaciones no gubernamentales que "uno de los cinco votos, que tienen que ver con decisiones como los cambios de recorridos, licitaciones, y demás puntos, sea de los usuarios".
Por otro lado, Aviano insistió con un proyecto que ya fue presentado ante el consejo consultivo del sistema de transporte, y es que "se evalúe la posibilidad de incorporar una variable que represente al usuario en el estudio de costos. "Esa diferencia que hay entre el valor real del boleto y lo que da el estudio de costos, siempre termina siendo una decisión política. Nosotros queremos que se incluya una variable del usuario para determinar cómo impactaría un aumento en el bolsillo de los que toman y pagan el colectivo". El activista puso como ejemplo que "actualmente la diferencia entre el boleto promedio y el estudio de costos es de ochenta centavos, y a partir de ese resultado no hay criterio de definición. La variable usuario podría tomarse del incremento salarial que percibieron los gremios más numerosos, para ayudar a determinar la suba".
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.