"Los horrores de la dictadura se alejarán para siempre, en tanto y en cuanto la democracia funcione", afirmó ayer Hermes Binner al presidir el acto mediante el cual el gobierno reincorporó a 23 empleados de la administración pública cesanteados en la última dictadura militar. "Mientras estamos reparando nuestros horrores o estas situaciones vergonzantes que dejó la dictadura, también tenemos que alentar todos los días estas posibilidades que hacen que esos horrores se alejen para siempre", dijo el gobernador. La adopción de esta medida -a 25 años de la recuperación de la democracia- se funda en que las leyes emitidas por el gobierno de facto eran "utilizadas como herramientas de separación" de sus cargos "de aquellos agentes que no comulgaban con la ideología impuesta desde dicho régimen" y como "instrumentos de persecución política", señala el decreto de reincorporación.