Las más de ciento cincuenta familias que habitan en los barrios de Flores y Los Unidos (Mendoza al 9900), contarán por primera vez en mucho tiempo con un transporte de pasajeros que los lleve directamente hasta la escuela Vicente López y Planes, donde concurren más de noventa niños entre los turnos mañana y tarde. Hasta ayer, el recorrido que realizan niños y madres diariamente se extiende a unas veinte cuadras, a través de un campo. Es un camino de tierra, apenas marcado, que pasa por detrás de los paredones de un exclusivo barrio cerrado. La mayor preocupación de los vecinos, que repitieron su reclamo y se movilizaron en varias ocasiones, es la falta de seguridad para sus hijos. La medida es posible gracias al aporte generoso y solidario de organizaciones sociales, que se hicieron eco a un pedido del concejal del ARI, Nire Roldán. "Hemos intentado que por todos los canales institucionales se de respuesta a esta situación, pero ni la Municipalidad ni el gobierno provincial atendieron el pedido de estas familias", explicó Roldán. "Por eso -continuó﷓ nos vimos obligados a buscar ayuda de particulares, ya que el reclamo tiene más de dos años y los niños no pueden esperar otra vez la finalización del ciclo escolar para que se tome una medida". El transporte gratuito se brindará por quince días, pero se espera que a través de nuevos donantes se pueda hacer extensivo hasta diciembre.