La comunidad universitaria se prepara para una manifestación este martes 23 de abril, en defensa de la educación pública, en el marco de la Marcha Federal Universitaria a la que se espera asistan miles de estudiantes, docentes y directivos, en rechazo al ajuste presupuestario y su compromiso con el sistema educativo.

La movilización, que lleva el lema "En defensa de la educación pública", cobra especial relevancia en un contexto marcado por medidas de ahogo dispuestas por el Gobierno nacional que amenazan con recortar los recursos destinados a la educación y la ciencia. Y fue respaldada por las 73 universidades públicas de todo el país

En la ciudad de Buenos Aires, la concentración será desde las 15.30 ante el Congreso Nacional. Desde allí, las columnas irán a la Plaza de Mayo. Y el acto central será a las 18, frente a la Casa de Gobierno, donde se leerá un documento común.

La convocatoria a esta movilización representa también un rechazo al avance de políticas anticientíficas y un llamado a priorizar la inversión en ciencia, tecnología y educación como pilares fundamentales para el desarrollo del país. Y busca generar conciencia sobre la importancia de la educación pública en el presente y el futuro de la sociedad argentina. 

Universidades de todas las provincias contra el ajuste de Milei en la educación

Las instituciones universitarias que participarán de la marcha se encuentran distribuidas en diversas provincias argentinas, incluyendo:

  • Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA)
  • Provincia de Buenos Aires (PBA)
  • Entre Ríos
  • La Rioja
  • Chubut
  • Córdoba
  • Santa Fe
  • Catamarca
  • Neuquén
  • Tucumán
  • Chaco
  • San Juan
  • San Luis
  • Santiago del Estero
  • Jujuy
  • Formosa
  • Misiones
  • Río Negro
  • Salta
  • La Pampa
  • Corrientes
  • Tierra del Fuego
  • Santa Cruz

Crisis universitaria: colegios sin luz y recorte en cirugías

En medio de esta situación, los alumnos del Colegio Nacional de Buenos Aires (CNBA) se enfrentan a la falta de suministro eléctrico ya que el gobierno dejó de mandar los fondos necesarios para mantener las condiciones básicas de infraestructura.

Mientras tanto, trabajadores del Hospital Universitario de Clínicas realizaron un abrazo simbólico para visivlizar los recortes drásticos en su presupuesto, lo que llevó a una reducción del 40% en el número de cirugías realizadas, poniendo en peligro la atención médica de miles de pacientes que dependen de este centro de salud.

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