EL PAíS

La tercera posición, en la versión Rodríguez Saá

Los allegados al puntano intentan negar que éste sea funcional a los intereses de Carlos Menem. Por el contrario, tratan de separar a su candidato del ex presidente y de Eduardo Duhalde.

 Por Martín Piqué

El apoderado de Adolfo Rodríguez Saá se tomó un tiempo para pensar. Tardó unos segundos hasta que recordó la frase casi perdida en su memoria. “Cuando en Estados Unidos y la URSS estaban en crisis, le preguntaron a Mao Tsé Tung qué iba a hacer China. Y él contestó: ‘Los chinos vamos a tomar té y café’”, evocó entonces el operador en diálogo con Página/12. La cita servía como metáfora de la estrategia del puntano, que aspira a mantenerse ajeno ante la pelea de Eduardo Duhalde y Carlos Menem. De cualquier forma, en el “adolfismo” dicen que el congreso del PJ que se reunió ayer es nulo, que el enfrentamiento “se judicializará” y postergará las internas. Y sospechan que Duhalde intentará aprovechar la situación para quedarse en la Rosada hasta finales de 2003.
Mientras el duhaldismo en pleno se “autoconvocaba” ayer en Parque Norte, Rodríguez Saá recorría las calles de Río Segundo, en Córdoba, en otra etapa de su “marcha de los sueños”. Pero, entretanto, seguía de cerca todo lo que pasaba en el complejo deportivo que controla Armando Cavalieri: a través del celular, y también a partir de sus operadores que habían permanecido en Buenos Aires.
Anoche, uno de los colaboradores de Rodríguez Saá argumentaba en contra del congreso llamado por Duhalde. “No es legal, porque tenían que haber convocado a los otros congresales (a los de La Rioja y San Luis, por lo pronto). Si se autoconvocaban, como hicieron, después tenían que convocarse de nuevo en cinco días”, aseguró el delegado “adolfista” a Página/12. Sin embargo, los congresales que se reunieron en Parque Norte tuvieron en cuenta esa cuestión, y convocaron a otro encuentro para el martes próximo, con el objetivo de “convalidar” lo resuelto.
Los allegados a Rodríguez Saá, ayer, analizaban los eventuales errores legales cometidos por los organizadores del congreso. Pero luego aclaraban que no tenían previsto impugnar las decisiones que se tomaron en Parque Norte. “En esa jugada no vamos a entrar desde ningún punto de vista”, anticipó uno de los asesores del puntano a Página/12. La misma idea había sido transmitida por el propio candidato a sus íntimos: “Vamos a desconocer el Congreso –comentó en una pausa de su gira de campaña–. La intención es postergar las elecciones”.
La estrategia de Rodríguez Saá, explican sus allegados, es distanciarse de Duhalde y también de Menem. En Córdoba, por lo pronto, se diferenció de los actos que realizan los demás candidatos peronistas, como el riojano: “Yo no los hago en base a plata, ni entregando tetra brik y choripán”, dijo. Y enseguida salió a contestar las críticas que le hicieron por haberse sumado al Consejo del PJ que domina el menemismo. Según las críticas, esa movida del “Adolfo” legitima al riojano, porque le permite competir con alguien. “Yo no he firmado ningún pacto, ni he asistido a Anillaco. Ni conozco Anillaco”, aseguró ante los periodistas.
Sus operadores también explicaron la incorporación de los delegados de San Luis al Consejo menemista. “Fue una táctica para evitar que Menem se quedara con el sello del PJ”, explicó uno de los operadores a Página/12. “Nosotros sabíamos que Menem quería proclamar su fórmula en el acto de Salta. Y al presentarnos, le hemos sacado esa posibilidad”, aseguró otro asesor. En el Movimiento Nacional y Popular (MNyP) creen que para ganar hay que separarse de Duhalde. Y que Néstor Kirchner y José Manuel de la Sota “han quedado enredados en los piolines” del Presidente.
Uno de los operadores de Rodríguez Saá, Luis Lusquiños, comprobó ayer la intensidad que puede cobrar el conflicto interno del PJ: visitó Quilmes, donde una bomba estalló en un local del MNyP. Luego, en diálogo con este diario, cargó contra los dos jefes del PJ, a quienes atribuye el recalentamiento de la situación política. “El señor Menem, el señor Duhalde y el señor Alfonsín están descuartizando la Argentina, porque están manipulando las elecciones y la democracia”, denunció. Un tono dramático que, sin nombrar a nadie, compartió ayer el intelectual francésAlain Touraine: pronosticó que el país “va hacia una catástrofe política” y que los candidatos “están decididos a terminar con las instituciones”.

Compartir: 

Twitter

Adolfo Rodríguez Saá siguió ayer su “Caravana de los sueños” en Río Segundo, Córdoba.
 
EL PAíS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.