Los trabajadores de la planta de Cargill en Ingeniero White (Bahía Blanca) realizaron ayer un acampe para manifestarse contra las medidas de ajuste y recorte de la firma. Se tomó la medida luego que la empresa suspendió por un plazo de diez días las operaciones, una acción que también se llevó adelante en la fábrica de la localidad santafecina de Villa Gobernador Gálvez. El Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros de Bahía Blanca aseguró que Cargill realiza un “lock out patronal”. Desde la firma aseguran que la paralización de las actividades se debe a la falta de seguridad laboral, en virtud de los paros resueltos para repudiar los despidos de más de 40 trabajadores.

“Hoy (por ayer) procedimos a armar un acampe en el acceso al puerto y en inmediaciones a la planta”, dijo Diego Márquez, el prosecretario del sindicato bahiense. Agregó que “estamos esperando a que nos convoquen a una audiencia en la delegación del Ministerio de Trabajo”, tras la denuncia presentada por la parte sindical durante esta semana. El dirigente mencionó que “en la planta hay supervisores o jefe de turnos pero no tienen gente, si le pasa algo no tiene calderista ni para prender nada, y eso sí es un riesgo”.