“Es la ilusión detrás de las cosas lo que nos pone en movimiento; el deseo de seguir haciendo música”, revela Tomás Viano Kantemiroff, actual cantante y principal compositor de So Abra, sobre el nombre del segundo disco del grupo: La ilusión detrás. Después de siete años sin editar y varios cambios de formación, este sexteto de música popular con espíritu rockero vuelve a la escena con un disco potente y versátil producido por Ernesto Snajer. “La búsqueda de una nueva sonoridad para el grupo apareció como un deseo pero también como una necesidad”, dice el baterista Lucas Wilders sobre la mudanza de un sonido más acústico a uno más eléctrico. “Apareció una batería en su concepción más tradicional en reemplazo de un set percusivo, las guitarras españolas fueron reemplazadas por una eléctrica y una electroacústica, y se sumó el color del saxo soprano. Una nueva forma de abordar las canciones quizá sin la estricta necesidad de hacer referencia a un género musical latinoamericano en particular”, detalla Wilders sobre este repertorio de canciones que presentarán hoy (viernes) a las 22.30 en Santos 4040 (Santos Dumont 4040).

El disco propone un viaje que empieza con la vibrante “Coraje”, sigue con las intimistas “Aparece desaparece” y “Nada en este mundo”, levanta vuelo con la folklórica “La mañana”, encuentra su punto alto con “Los pies” (con los aportes de Snajer en guitarra y Lito Vitale en sintetizadores), llega a un remanso con los delicados arreglos de cuerda de “Viaje” y culmina con la jazzera “Ombú”. “Llegamos a un sonido de mixturas porque nos atraviesan muchísimas músicas. Algunos de nosotros hicimos carrera en conservatorios clásicos (Manuel de Falla) y otros en conservatorios populares (EMPA). Como en este segundo disco los arreglos se hicieron en la sala tocando, cada uno pudo aportar su universo musical propio”, se explaya Kantemiroff. Y Wilders precisa: “Nadie podría decir que en el disco se escuchan canciones con ‘aires de’ chacarera o zamba. Sin embargo, quien escuche atentamente podrá identificar algunos pasajes o grooves que están inspirados en esas músicas populares”.

El ensamble se completa con Iván Katzman (flauta traversa, saxo soprano y voz), Nicolás Álvarez (guitarras y voz), Joaquín Coscarelli (guitarras y voz) y Gonzalo Falzari (bajo eléctrico y voz). De algún modo, el abordaje que proponen continúa una línea estética que remite a nombres como Chango Farías Gómez, Raúl Carnota, Puente Celeste, Aca Seca Trío, aunque ellos consideran que es “demasiado” grande la comparación. “Son grandes maestros para nosotros, referencias ineludibles en nuestra escucha e influencias a la hora de componer y arreglar. ¡Pero si nos creemos continuadores de todos esos grandes estamos medio fritos!”, relaja el baterista.