Cristiano Ronaldo no quiere dejar dudas de que éste es su Mundial. Por si los tres goles en el empate del debut frente a España no habían sido lo suficientemente claros, el de camiseta número siete volvió a marcar ayer para darle el triunfo a Portugal sobre Marruecos por 1-0. Lo que deja bien parados a los suyos en la clasificación y elimina las chances de los africanos de pasar de ronda.

En sus tres Copas del Mundo anteriores, Cristiano había marcado sólo tres goles –uno en cada una–. Pero en Rusia, a los 33 años, al de Real Madrid le salen todas. Frente a Marruecos, tan sólo cuatro minutos necesitó para marcar de cabeza el único y definitivo tanto del encuentro disputado en el estadio Luzhniki, en Moscú. Fue tras una jugada de corner corto que le dio tiempo a Ronaldo y cía. hacer varios movimientos para perder sus marcas. 

Pero lo que parecía podía llegar a ser una goleada lusa terminó por convertirse en un sufrimiento para los vigentes campeones de Europa. Marruecos, al igual que en el debut frente a Irán, monopolizó la pelota e hizo correr a los europeos por todos lados. 

La resistencia lusa se sostuvo, en gran parte, por la buena actuación de su arquero Rui Patricio y por la ineficacia de los africanos. 

“Lo más importante es ganar y obtener los tres puntos. He logrado marcar el gol y estoy muy contento”, comentó Cristiano, el goleador de la Copa con cuatro tantos, quien no se mostró muy satisfecho con lo hecho por sus compañeros. “No estoy contento con el juego de mi equipo. Hemos presionado al rival al principio, pero a partir del minuto 15 no hemos podido hacernos con el control del balón. Lo mismo nos sucedió con España, que nos hizo correr detrás de ellos en todo momento”, concluyó. En cifras, el dominio marroquí fue del 58 por ciento con respecto a la posesión de la pelota; mientras que en materia de pases, los marroquíes realizaron 501 contra 414 de los portugueses.