La tasa de desocupación en Rosario para el segundo trimestre de 2018 se estima en 13,33%. La tasa de subocupación es del orden de 13,70%. Los indicadores de empleo empeoraron levemente con respecto al 1° trimestre de 2018. La problemática del desempleo de los últimos años en Rosario puede definirse como un problema derivado de desigualdades de género - las mujeres sufren más la desocupación que los hombres- y de desempleo joven: quienes tienen hasta 29 años suman los dos tercios de quien no pueden trabajar. En dicho rango etario, el desempleo alcanza el guarismo de 25,65%, dos veces al observado para el conjunto poblacional. El optimismo constatado en los últimos meses de 2017 se diluyó en los últimos 6 meses: tan solo un 22% de los encuestados describe sus expectativas de forma positiva contra el 53% de pesimismo. Esta son las principales conclusiones del informe del mercado de trabajo de Rosario elaborado por el Centro de Estudios del Mercado de Trabajo de Rosario del Sindicato de Trabajadores Judiciales en conjunto con el Centro de Estudios Scalabrini Ortiz (CESO).

Los aumentos de precios producto de la devaluación y el aumento de la tasa de interés por encima del 40% a partir de mayo han comenzado a generar sus efectos sobre las cadenas de pago, la demanda de productos y finalmente sobre el empleo. 

Los cambios de modelo económico y en las políticas de empleo que se produjeron con la nueva gestión de Gobierno han puesto el foco de atención en el seguimiento de la evolución del desempleo especialmente a partir de la crisis cambiaria que comenzó en mayo y aún persiste.

Rosario es un área de interés para el estudio laboral no solo por ser la ciudad más poblada de la provincia sino también por su base económica fuertemente arraigada en la industria (la actividad más afectada por la apertura de importaciones y el nuevo modelo económico), y el comercio (afectado principalmente por la caída del consumo y por los aumentos tarifarios de los servicios públicos que impactan fuertemente en los costos).

Si bien existen datos de desempleo a nivel local, que se nutren de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), la publicación de dicha información se realiza de forma rezagada o tardía. Por ejemplo, en abril de este año recién se cuenta con la información para el último trimestre de 2017. “Siendo este uno de los argumentos más fuertes para construir una medición propia del desempleo en Rosario que dé cuenta de la situación del empleo en tiempo real”, señalaron los investigadores.

En el presente informe se presentan los resultados del relevamiento realizado a distintos hogares de Rosario. Las 469 encuestas trimestrales realizadas recabaron no solo información sobre cantidad de desempleados y las particularidades del mercado laboral rosarino.

Algunas otras conclusiones:

*La informalidad, medida en términos de aportes y descuentos jubilatorios, es de 40,76%. El salto respecto al cierre de 2017 se debe a la devaluación del peso, ajuste fiscal y tasas de interés por encima del 40% a partir de mayo. Esto se debe a que la disminución en la actividad económica suele afectar primero a los sectores informales.

* Dentro de la población desocupada, más de la mitad dejó de trabajar hace 3 meses o menos. Si se suma a los que recién ingresan al mercado laboral, el desempleo explicado por un plazo temporal relativamente corto supera el 75,39%.

*Las mujeres muestran menores tasas de actividad, y sin embargo, mayor desempleo que los varones. La tasa de desempleo de las mujeres es aproximadamente del 16,42%, un aumento de 2pp con respecto a la 1° trimestre de 2018.

*El desempleo es mayor para las personas con menores niveles de educación: La tasa de desempleo de las personas activas que a lo sumo han completado el secundario es más de 100% superior a la de los rosarinos con formación universitaria o terciaria. Esto señala una intensificación de las brechas con respecto al 1° trimestre de 2018 en donde tal diferencia era solo de 70%.

*El 63% de los rosarinos describe la situación laboral general como negativa contra el 8% que la describe positivamente.

Cristian Recchio, ex gerente de empleo de la Nación hizo algunas reflexiones sobre el estudio para Rosario/12: “La problemática del desempleo de los últimos años de Rosario puede definirse sin ambigüedades como un problema de derivaciones de desigualdades de género y de desempleo joven. El carácter jovial del mismo adquiere fisonomías estructurales, siendo necesario programas específicos para su atenuación”.

Agregó que “dos tercios del desempleo observado es un desempleo entre la franja etaria de hasta 29 años. Paralelamente, si admitimos un desempleo de pleno empleo de 6% (el llamado desempleo friccional), la mujer supera en más de 10 puntos porcentuales a dicha tasa”.

“En materia de derechos laborales, si bien muestra guarismos importantes, no se contempla una diferencia significativa con lo que acontece en el ambiente nacional. Las causas de cualquier escenario observado pueden explicarse, así, por la coyuntura nacional. En este sentido, el descenso de 1,5punto porcentual de la regularidad laboral conforma parte de una escena nacional de degradación laboral al calor de las vicisitudes económicas ocasionadas por las políticas gubernamentales de desregulación cambiaria, ajuste fiscal, alza de los tipos de interés y paralización de las cadenas de pagos,” señaló Recchio.