Una joven sueca de 22 años evitó la deportación de un afgano. Lo hizo en un vuelo que unía Suecia y Turquía. Elin Ersson, de 22 años, no quiso tomar asiento hasta que no saliera del avión el hombre, de 52 años.
La acción fue absolutamente determinada. Ersson se había manifestado minutos antes junto a unas 25 personas y luego subió al avión. Ya había comprado su pasaje, y dentro del avión inició una transmisión a través de Facebook. El video tuvo desde ayer unas 25 millones de reproducciones. Se la ve mientas habla a los pasajeros y la tripulación y advierte que el hombre, casi con seguridad, moriría si volvía a Afganistán.
La joven les pidió a los pilotos que se negaran a viajar con un deportado y tuvo roces con las azafatas, que quisieron impedir la grabación. Ersson recibió aplausos de buena parte del pasaje. Por protocolo, un avión no puede despegar si no están todos sentados. Tres guardias de seguridad sacaron al hombre del avión.
Suecia recibió unas 160 mil solicitudes de asilo en 2015 y el número ha disminuido en estos años. En su mayoría, el país escandinavo ha recibido personas de Somalía, Irán, Irak y Siria. De momento, se ignora si continua el proceso de deportación del afgano. Ersson se expone ahora a seis meses de prisión por negarse a cumplir las órdenes de las autoridades abordo.
“Hago lo que puedo para salvar la vida de una persona”, declaró la joven, que estudia Trabajo Social en la Universidad de Gotemburgo. “Creo que podríamos tratar mejor a los refugiados en un país rico como Suecia”, agregó.
