Mientras el mercado financiero sacude las reservas, cadenas de supermercados anuncian el cierre de sucursales y el Estado agranda las nóminas de despedidos, la gobernadora María Eugenia Vidal evaluó que “empiezan a verse algunas señales de que va a haber trabajo”. Durante una entrevista televisiva, la mandataria citó a “mi amiga” Elisa Carrió y afirmó que la crisis actual es un capítulo más de “los dolores del parto” de una nueva Argentina. A pesar de los vaticinios optimistas, Vidal se sumó al coro de advertencias de los funcionarios de Cambiemos y admitió que la situación actual “es angustiante” y que “se vienen tiempos difíciles”.