Un avión que había partido del Aeropuerto de Ezeiza rumbo a la ciudad colombiana de Bogotá debió retornar a suelo argentino por un desperfecto técnico que obligó a los pilotos a desprenderse de combustible, siguiendo el protocolo de seguridad.

Se trata de un Boeing 787-8 Dreamliner de Avianca que realizaba el vuelo AV088 y que tenía como destino la capital colombiana. Tras despegar a las 8.30 del Aeropuerto de Ezeiza, la aeronave sufrió un desperfecto técnico en los “flaps”, el mecanismo del ala que permite la sustentación en distintos momentos del vuelo. “Van a ver combustible despedido por la ventanilla”, advirtió el piloto, y explicó que la maniobra era “para alivianar el peso” y poder tener mayor control del avión.