El flamante delegado permanente del Fondo Monetario Internacional en la Argentina todavía no cuenta con un espacio para desarrollar sus tareas de supervisión y control del programa de financiamiento solicitado por el gobierno de Mauricio Macri. El jamaiquino Trevor Allayne llegará al país en noviembre para asumir la función de “representante residente” y pretende ocupar una oficina dentro del Banco Central. El gobierno argentino busca limitar la estadía del enviado de Christine Lagarde en el interior de la autoridad monetaria. Apuesta a que el FMI alquile una locación fuera del BCRA. “Es normal que el FMI, en los países donde hay un programa, tenga un representante residente”, consideró el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, al justificar el desembarco de Allayne en Buenos Aires. “Transitoriamente va a tener una oficina en el Banco Central y seguramente luego de un período de transición tendrá una afuera del BCRA”, señaló el funcionario.

El FMI cerró sus oficinas en 2006. Estaban ubicadas en Paraguay y Cerrito. La decisión llegó después de que Argentina decidiera cancelar de manera anticipada la deuda con el organismo durante el gobierno de Néstor Kichner, pero el motivo central para irse fue el ajuste interno desplegado ante la escasa solicitud de sus servicios. El vínculo bilateral se relanzó en 2016 pero la reapertura de las oficinas recién se cristalizó con la puesta en marcha de un nuevo acuerdo stand-by. Sujeto a la implementación de un exigente programa de ajuste fiscal y monetario, el Fondo prometió un préstamo por más de 57.100 millones de dólares. El crédito que fue solicitado por el gobierno en medio de la corrida cambiaria para intentar despejar la incertidumbre sobre la capacidad de pago de la deuda todavía debe recibir el visto bueno de las autoridades del FMI.  

Aunque el acuerdo se anunció a fines de septiembre, la votación en el directorio del FMI recién tendrá lugar a finales de octubre. A pesar de la urgencia de la solicitud, el organismo decidió postergar la decisión para después de la celebración de sus reuniones anuales que este año se realizaron en Indonesia. La expectativa es que Allayne arribe al país a comienzos de noviembre. Desde el BCRA confirmaron que le cederán un espacio en la entidad. La presencia del representante del FMI en las bancas centrales de los países es una práctica habitual. El organismo cuenta con más de 70 oficinas alrededor del mundo.